‘Adelante’ analiza al Barça B en su Cara B. Algunas de las grandes promesas del fútbol español visitan Riazor para demostrar que merecen estar con ‘los mayores’.
El Deportivo recibe mañana a un Barcelona B que llega en su mejor momento de la temporada, noveno en la clasificación y con mucha hambre de hacer historia en un estadio como Riazor, donde intentarán repetir el dominio que hace tres semanas ejerció el Villarreal B sobre los de Oltra.
Contexto. Los nuevos valores empiezan a acomodarse. Tras un inicio dubitativo, ya son novenos en la tabla.
Poco se parece el Barcelona B al equipo temeroso y con más calidad que claridad que vimos en la tercera jornada de Liga, cuando el Deportivo le endosó un 2-3 tras una primera mitad horrenda de los catalanes. Ahora, el filial blaugrana se ha adaptado por fin a la salida de Luis Enrique, a Eusebio y a sus nuevas perlas. El entrenador vallisoletano ha conseguido la regularidad que le faltaba al inicio de temporada y ha estabilizado un once al que cada vez le influyen menos las ausencias por compromisos con la primera plantilla. Los culés han registrado tres victorias y un empate en las últimas cuatro jornadas y ya ocupan la novena posición. La clase, ambición y las posibilidades por alcanzar el sueño de estar a las órdenes de Guardiola hacen que estos futbolistas conformen uno de los conjuntos más complicados de la categoría.
La pizarra. Solo la inexperiencia los priva de jugar como los mayores. La disposición táctica y la idea de atacar a través de la posesión es igual a la del primer equipo.
Quien haya visto jugar al campeón de Europa ya ha visto jugar al Barcelona B. La idea del filial blaugrana es la misma que la de la primera plantilla. Los catalanes basan su fútbol en la posesión de balón, en la paciencia y en abrir el entramado defensivo del rival moviendo el esférico de un lado a otro con una disposición táctica de 4-3-3, aunque en ocasiones ya les hemos visto con un 3-4-3. Vital es la incorporación de los laterales -Balliu y Planas- al ataque como también lo es el tener dos extremos puros -Deulofeu y Femenía- capaces de superar a cualquier lateral a través del desborde o con sus desmarques buscando la asistencia de los de la medular, que merece una mención especial. Rafinha y Sergi Roberto dirigen el timón de un equipo equilibrado por Jonathan Dos Santos y que tiene en el medio su centro de operaciones. Las ausencias de hombres importantes como Montoya o Tello no han afectado ni afectarán el sábado a una plantilla en la que todos rinden al máximo nivel. El Deportivo deberá preparar bien el choque si no quiere que se repita lo que sucedió ante el Villarreal B.
Nombres propios. Un equipo plagado de futuras estrellas. Rafinha lleva el mando y ha sido el más regular de todos.
– El ‘muro’: Armando. El capitán es uno de los fijos en los onces de Eusebio y su trabajo como central es siempre impecable. Buen remate de cabeza, perfecto tácticamente y correcto en el ‘tackle’.
– El ‘cerebro’: Rafinha. El hijo de Mazinho ha sido el mejor en lo que llevamos de temporada. Tiene regate, pase, llegada y gol. Reúne todas las condiciones para ser igual o mejor que su hermano.
– El ‘killer’: Rodri. Lastrado durante varios partidos por la presencia de Jonathan Soriano. El andaluz siempre rinde al máximo nivel y ya lleva seis goles.
– El ‘fiasco’: Oriol Rosell. El central inició la temporada como uno de los titulares, pero su bajo rendimiento -todavía tiene 19 años- lo ha mandado al banquillo. Estuvo a punto de marcharse en invierno, aunque prefirió quedarse para luchar por el puesto.
Horizonte. Al servicio de Guardiola. El mejor filial de España.
La cantera del Barça no solo es la envidia del fútbol español, sino que actualmente todo el mundo del fútbol mira hacia La Masía como una gran referencia en la gestión de sus categorías inferiores. De ellas, el Barcelona B de Eusebio es su máximo exponente. El conjunto filial no deja de proveer al primer equipo de jugadores y a algunos nombres en la última década que ya han pasado a la historia del fútbol español y mundial, se han unido esta campaña el habilidoso Isaac Cuenca y el veloz Cristian Tello. Ninguno de ellos fue titular en el encuentro de la primera vuelta ante el Dépor. Por lo que su objetivo, más allá de alcanzar una permanencia que ya parece asegurada y con el ascenso imposible reglamentariamente, sigue siendo ese el gran objetivo del filial blaugrana.
Un aficionado ilustre. Un equipo de leyenda. Los mayores muestran su continuo apoyo.
Como todo filial, el Barcelona B no cuenta tras de sí con una masa social propia. De hecho, el Nou Estadi fue el año pasado el equipo de la categoría con menor afluencia de la categoría, por detrás del campo de la ciudad deportiva del Villarreal. Sin embargo, los chicos de Eusebio pueden presumir de contar con el constante apoyo de uno de los mejores equipos de la historia del fútbol. Y es que ‘los mayores’ se dejan habitualmente ver por las gradas del campo blaugrana, animando a los que serán sus relevos en el futuro. Xavi, Piqué, Iniesta o el propio Pep Guardiola son muestran interés continuo en la evolución de los chavales.
Un lazo blanquiazul. Tres en uno: Rodri, Cristian y Verdú. El ‘Baby Dépor’.
En 2005, inmerso en una delicada situación económica, el Deportivo apostó por Joaquín Caparrós para liderar un proyecto restringido por una mínima inversión en fichajes. Se apostó en el de Utrera, avalado por su brillante trabajo en Sevilla como gestor de talentos, y, desde su llegada, propuso una gran revolución, derrocando a antiguas leyendas y apostando por los más jóvenes. En su segunda temporada, el Deportivo insistió más en esa idea, hasta adquirir el nombre del ‘Baby Dépor’. Ese 2006 llegaron tres jugadores directamente desde La Masía: Rodri, Cristian y Verdú. Su objetivo era buscar un sitio en Primera División, una vez que el Barça apostó por otros jugadores, y el Deportivo les ofreció un hueco en la máxima categoría del fútbol español.
Adelante. Cara A. http://hemeroteca.riazor.org/asi-es-el-barcelona-b-1017755