El Deportivo ha sorprendido en el mercado con el fichaje de Edu Sousa. El portero gallego, que ya había pasado por Abegondo en su etapa de formación, regresa convertido en todo un clásico de Segunda B con más de 200 partidos a sus espaldas. Su rol, en principio, será el de suplente de garantías con la capacidad para exigirle a Ian Mackay su mejor versión en el día a día. Pero con la llegada de Edu, la gran incógnita es qué pasará con Pablo Brea. Así queda la situación de la portería del Deportivo.
La ‘necesidad’ de un portero sub-23 en Primera RFEF
La Federación estipula que las plantillas de los equipos de Primera RFEF deben tener un máximo de 17 fichas senior, a las que se pueden añadir un máximo de 6 fichas sub-23 para completar el tope permitido de 23 jugadores. Hay una excepción para elevar este tope y es la de contar en plantilla con tres porteros en lugar de dos. En ese caso, se permitiría una ficha extra para un guardamenta (18 en lugar de 17), pero que en ningún caso se podría utilizar para un jugador de campo.
De esta forma, tanto el Deportivo como cualquier equipo que pretenda tener dos porteros senior en la plantilla, tiene la ‘necesidad’ de seguir contando con un tercer arquero que sí sea sub-23. Puede optar por no hacerlo, pero esto supondría reducir el número de jugadores de campo senior a 15, algo que todos los equipos suelen descartar ante el siempre difícil reto de incorporar futbolistas jóvenes cuyo rendimiento sea de garantías.
El dilema de Pablo Brea… y del Deportivo en la portería
De esta forma, hay una alta probabilidad de que el Deportivo vaya a contar con tres porteros esta temporada. Y ahí es donde aparece el dilema con Pablo Brea. El canterano acaba de cumplir 21 años y encajaría en ese perfil de guardameta joven, pero hacerlo supondría, casi con total seguridad, pasar otra temporada sin apenas competir. Tiene contrato hasta 2024 y parece la opción más lógica, aunque habrá que esperar para conocer los planes que tienen tanto el jugador, como también el Deportivo para esta demarcación.