Un sólido Deportivo, superior y efectivo, se impuso al Sabadell por 0-3 con doblete del debutante Borja Bastón. El tercer tanto fue obra de Arizmendi.
Como un diésel, poco a poco, piano piano, funciona el Deportivo de Fernando Vázquez. Sin gran juego, ni grandes alardes -salvando a Rudy-, pero sólido y eficiente, con pegada y oficio, cada vez con más toque y pausa, cada vez más dañino al paso de los minutos. Porque comenzó apretando el Sabadell, ahogando a un Dépor lento y previsible, encimando a Domínguez, juntando líneas y jugando sus bazas. Pero, según avanzaba el reloj, quizás por las pretemporadas de Vázquez, o quizás por talento y lógica futbolista, lo cierto es que languidecían el equipo catalán y su ímpetu inicial y crecía el Dépor, más entero físicamente, en su juego y sus armas, con Juan Domínguez imponiéndose y haciendo jugar al conjunto herculino.
Tras dos partidos y tres puntos, con el cierre de mercado a poco más de 24 horas y muchos frentes abiertos en cuánto a salidas y traspasos, se presentaba el Deportivo de Fernando Vázquez en el estadio Nova Creu Alta para enfrentarse al Sabadell. Y lo hacía, además de estrenando la tercera equipación, de color amarillo, con tres novedades respecto al once que presentó frente al Córdoba: Luisinho por Manuel Pablo, Borja Bastón por Luis y Culio –sancionado frente a los andaluces- por el polaco Wilk. Así pues, Bergantiños y Domínguez, producto Abegondo, expertos en la categoría, volvían para intentar llevar manija del mediocampo blanquiazul. Nada más lejos de la realidad en el comienzo, pues el planteamiento de Salamero permitió al Sabadell, bien organizado y con una incesante presión, derrochando intensidad, desactivar a un Dépor plano que no encontraba opciones.
Así, con dos hombres sobre el 10 de Pontedeume, el conjunto arlequinado, asentado y solidario, lograba crear peligro en balones largos a la espalda de la defensa. Balones largos como el que dejó a Aníbal Zurdo solo ante Germán Lux en el minuto 25 tras un garrafal fallo de coordinación entre Kaká e Insua, pero el ariete nacido en México erró ante la meta herculina hasta en tres ocasiones: rechazó Lux en primera y segunda instancia, salvó Insua bajó palos la tercera. Fue la oportunidad el Sabadell, su ocasión para desnivelar la balanza mientras pudo contener a un Dépor en el que solo Rudy se salía de la norma y rompía líneas, casi siempre desde la izquierda, pues Laure y Arizmendi se mostraron inoperantes en ataque durante todo el primer periodo. Poco daño el Dépor, solo alzado cuando Juan Domínguez se libraba de los marcajes o cuando el equipo, cada vez más arriba en la presión, robaba cerca de la meta local. Así llegó en el 31’ la más clara oportunidad de la primera mitad, en una pelota que robó Culio y cedió a Bastón que, solo en el punto de penalti, remató en semifallo e hizo que el esférico llorara hasta topar con el palo izquierdo del meta del conjunto arlequinado. Se iba a redimir poco después, sin embargo, el debutante.
No hubo mucho más hasta el final en lo que estaba siendo un soso encuentro por parte de ambos conjuntos. Pero llegó la segunda parte y todo cambio. Casi desde el vestuario, a los dos minutos de la reanudación, eléctrico Bastón, aprovechó un error en la defensa arlequinada para robar, tirar un autopase y definir con un disparó fuerte y raso desde fuera del área que besó el palo izquierdo de Navas antes de entrar en la jaula. 0 a 1, gol de genio y el panorama cambiaba completamente. El Dépor estaba más entero, se sentía superior y poco a poco lo fue aprovechando, sucediéndose las ocasiones y los goles. En el 8’, con el Sabadell noqueado y Bastón en modo estrella, Laure desaprovechó un mano a mano con Raúl de Navas tras una fenomenal asistencia del ex del Atlético, que recogió el rechace y, de nuevo desde fuera del área, obligó a lucirse al guardameta local.
Con el partido controlado por parte de los de Vázquez y sin acercamientos locales, los minutos pasaban y el Dépor dominaba, oliendo sangre, palpándose el segundo tanto. Tanto que llegó en el minuto 29, cuando Borja Bastón hundía en la red un misil desde dentro del área tras pase de Bergantiños. Gol de ariete, de nueve puro, de un tipo que primero dispara y luego pregunta.
Poco después, y ya con Culio fuera del campo, una vertiginosa contra en el 78’ entre Arizmendi y Rudy, velocistas del 100 metros por un instante, terminaba con una definición sutil del incansable atacante madrileño que sentenciaba completamente el partido. Pese a todo, no dejó de presionar y salir rápido el Dépor, que en otra contra lanzada desde la defensa, a punto estuvo de hacer el cuarto: balón a Luis, que cede a Rudy y el portugués, tras dos fantásticos recortes, envía el balón al palo. Fue la última acción de peligro de un Dépor superior, sobre todo en la segunda parte, conocedor de sus virtudes y defectos, poderoso con espacios y mejor con el paso de los minutos. A destacar también el gran partido de Luisinho, apoderado del carril izquierdo, con técnica y recorrido, así como la pausa y el talento de Culio o la clase de Rudy, que a poco que aproveche un poco más todo lo que produce será determinante en la categoría.
Ficha técnica:
R.C.Deportivo: Lux; Laure, Kaká, Insua, Luisinho; Álex Bergantiños, Juan Domínguez; Arizmendi, Culio (Juan Carlos, min.76), Rudy (Bicho, min.90); Borja Bastón (Luis Fernández, min.85).
Sabadell: De Navas; Ruper, Kiko Olivas, Carlos Hernández, Javi Barral (Martí Crespí, min.70); Cristian García, Longás (Antonio Gómez, min.80), Sotan Tanabe (Collntes, min.57) Gato, Llorente y Aníbal.
Goles: 0-1, Borja Bastón, min.47. 0-2, Borja Bastón, min.74. 0-3, Arizmendi, min.78..
Árbitro: Ocón Arráiz (comité riojano).Mostró tarjeta amarilla a Longás, Llorente, Ruper, Culio y Luisinho.
Incidencias: partido correspondiente a la 3ª jornada de la Liga Adelante 2013/2014 disputado en el estadio Nova Creu Alta ante aproximadamente 7.000 espectadores, representación blanquiazul en las gradas incluida.