Tras veinte años de carrera profesional, Dani Mallo (Cambre, A Coruña; 25 de enero de 1979) decidió colgar los guantes el pasado mes de noviembre y desde entonces dedica gran parte de su tiempo a seguir con detalle la actualidad del Deportivo. Por ello, hemos querido hablar con un exfutbolista que ya ha vivido situaciones similares a la actual y que desde su conocimiento de la portería nos analiza el puesto que más quebraderos de cabeza está dando al conjunto herculino.
¿Cómo ves la situación del Dépor?
Pues como aficionado lo veo con un poco de preocupación porque son muchas jornadas sin conseguir resultados positivos y todos esperamos que llegue esa reacción tan necesaria y con ella las victorias.
¿Cómo se puede explicar este rendimiento que ha ofrecido hasta ahora el equipo?
Desde fuera es complicado pero pienso que quizás las expectativas que se generaron eran algo altas. Nos pusimos todos unas metas en la cabeza que son difíciles de alcanzar y pienso que tendríamos que haber sido más realistas.
Viendo las últimas temporadas del equipo, ¿crees que puede pesar en los jugadores poner esas expectativas tan altas?
Date cuenta de que cuando uno genera expectativas altas luego es muy difícil encontrarse con una realidad diferente. Si hablas de Europa y estás en descenso la situación se complica y puede verse afectado el rendimiento de los jugadores porque algunos de ellos nunca se han visto en una situación así.
La realidad es que 17 puntos a estas alturas es un bagaje muy pobre.
Sí, pero creo ahora mismo es momento de compararnos con los equipos que están con nosotros. No quiero que suene a consuelo sino que es la realidad y son los equipos que van a luchar con nosotros por no descender. Si comparas la situación con Las Palmas, Levante y Málaga tampoco es tan grave en lo que a puntos se refiere. Ahora mismo creo que lo más importante es revertir las sensaciones que está dejando el equipo.
Entiendo que compartes la opinión de que el Dépor tiene por delante una Liga de cuatro equipos en la que tiene que terminar primero.
Sí, los números están ahí y la Liga te pone donde tienes que estar. Ahora mismo en la cabeza de todos está claro que el objetivo de este equipo es salvar la categoría como sea y de la manera más digna posible.
¿Qué se le puede pasar por la cabeza a un jugador del Dépor a día de hoy?
Yo confío y creo que ahora mismo por la cabeza de los jugadores solo puede pasar la idea de recuperar sensaciones y salvar la categoría. Hay que pensar en las cosas que se están haciendo mal y conseguir victorias para salir de la zona baja.
¿Ves a un equipo que es frágil mentalmente y que encaja mal los golpes dentro de un partido?
Yo creo que eso responde más a lo que hablaba antes. Me parece que nadie pensaba en que la temporada se iba a desarrollar de la manera en que se está desarrollando y hay jugadores que no están acostumbrados a jugar en estas situaciones. Pero confío en estos jugadores y creo que son conscientes de lo que hay en juego y lo que supone vestir esta camiseta. Creo que es momento de estar todos juntos e intentar salir de esta situación.
¿Qué te pareció la llegada de Seedorf?
Yo creo que cuando hay un cambio de entrenador es normal intentar cambiar las cosas, las costumbres y los entrenamientos para ver si da con la tecla adecuada y que reactive al equipo. Creo que es una forma de romper con lo anterior y desde ahí esperar que cambien las cosas y la confianza.
El problema es que utilizar ya tres entrenadores no habla bien de este equipo.
Está claro. Un cambio de entrenador ya hace ver que las cosas no están saliendo como quieres así que dos multiplica esas sensaciones. Pero a estas alturas es el momento de buscar soluciones, de estar todos juntos y que dentro del vestuario se encuentre la solución. Desde fuera pienso que hay que sumar y ayudar porque el Dépor tiene que estar en Primera División. Las responsabilidades y las causas de este rendimiento hay que pedirlas a final de temporada porque ahora no es el momento.
Es obligatorio preguntarte por la portería.
Está claro que no es normal que hayan jugado ya cuatro guardametas. En todos mis años como profesional nunca había vivido una situación como esta. Tiene que estar siendo muy incómoda para ellos pero cuando eres profesional te juzgan por tus actuaciones y los resultados están ahí. Es una lástima que se hable tanto de la portería del Dépor porque no es buena señal y refleja un poco como está el equipo: inseguro y sin confianza. El puesto de portero es del que más depende un equipo y el Dépor ahora mismo es un claro ejemplo. La portería es siempre el puesto que más se resiente con el rendimiento de un equipo. Cuando un equipo está sólido, el portero también suele estarlo y cuando el conjunto está más inestable, la portería también se resiente. También creo que la situación en la tabla no es responsabilidad del portero.
¿Qué se le puede estar pasando a Rubén por la cabeza?
La verdad es que no lo sé porque cada uno lleva la cruz como puede. Yo tenía un entrenador que decía que “la portería la sufrimos los porteros”. Es una situación complicada pero confío en Rubén, que es un portero con mucha experiencia. Solo espero que esté bien de forma física y mental y ayude al equipo a sacar esto. Supongo que estará preocupado porque aunque los goles no son siempre culpa del portero, es el portero el que siempre recoge el balón dentro de la portería.
Y llega ya lo de este viernes.
Yo estoy cansado de hablar de finales. Creo que el Dépor tiene un partido más y tres puntos importantes, pero te digo una cosa: ningún equipo se va a salvar este fin de semana ni tampoco va a descender. Desde todos los estamentos creo que hay que quitar un poco de hierro a estos partidos. Creo que es un partido importantísimo, pero repito, nadie desciende ni se salva en febrero.
Por lo tanto abogas por un mensaje de calma.
Es que por mi experiencia en el mundo del fútbol creo que es la única manera de salir de esta situación. Si nos volvemos ahora locos, si la afición deja al equipo, si el grupo se abandona, eso es lo peor que podemos hacer. ¿Qué te va a salvar? Que el equipo esté unido y que el grupo enganche a la afición a través de un buen rendimiento en el campo. Desde fuera nos toca una vez más apoyar en una situación complicada, pero espero que los jugadores sean conscientes de lo que da la gente por ellos y devuelvan todo eso en el campo. Perder o ganar forma parte del deporte y creo que se entiende lo que quiero decir.