Comienzan a resolverse incógnitas sobre la Segunda División B 20/21. El Deportivo ya conoce a los rivales de su subgrupo. Si nada se tuerce, la competición arrancará el fin de semana del 17 y 18 de octubre. El aumento del número de equipos y la creación de cara a la siguiente campaña de la Segunda B Pro suponen varios cambios en la división de bronce respecto a los cursos anteriores. Repasamos las claves del nuevo formato de la Segunda B para la temporada 20/21.
La tercera categoría del fútbol español se reparte en cinco grupos, divididos a su vez en dos subgrupos cada uno. Los grupos se nombran por números (I, II, III, IV y V), mientras que para distinguir los subgrupos se emplean letras. Por ejemplo, el Deportivo forma parte del Grupo I, subgrupo A. Cada uno de estos subgrupos está compuesto por 10 equipos, aunque debido a que finalmente la categoría cuenta con 102 equipos, los subgrupos II.A y III.A tienen un conjunto adicional. Aquí puedes consultar los integrantes de todos los grupos y subgrupos.
En la primera parte de la campaña, los equipos juegan una liga de ida y vuelta ante todos los integrantes de su subgrupo. Así, esta primera fase contará con un total de 18 jornadas. En ella, el Dépor visitará y recibirá a Compostela, Pontevedra, Racing de Ferrol, Celta B, Coruxo, Unionistas, Guijuelo, Salamanca y Zamora. Los tres primeros de cada subgrupo siguen adelante en la pelea por el ascenso, los tres últimos pelearán por evitar el descenso y los que ocupen posiciones intermedias pelearán por formar parte de la nueva Segunda B Pro.
Tras el subgrupo, liguilla de ascenso y playoff
En este nuevo formato de la Segunda B, el camino hacia el ascenso continúa con una liguilla en la que se unen los tres primeros clasificados de los subgrupos pertenecientes a un mismo grupo. De este modo, si el Dépor queda entre los tres primeros, se encontraría con los mejores equipos del otro subgrupo del Grupo I. Los posibles rivales serían Langreo, Oviedo B, Sporting B, Marino de Luanco, Covadonga, Lealtad, Numancia, Cultural Leonesa, Valladolid Promesas y Burgos. Aplicando esto al resto de grupos, nos encontramos con que quedan vivos 30 equipos, repartidos en 5 liguillas de 6 conjuntos cada una.
Durante esta segunda fase, cabe destacar que se arrastran todos los puntos sumados en el subgrupo inicial. Por tanto, solo se jugarán seis jornadas más, a ida y vuelta frente a los tres equipos del otro subgrupo. De nuevo, para seguir adelante es necesario concluir esta liguilla en una de las tres primeras posiciones. Eso sí, en este caso, y para cuadrar las posteriores eliminatorias, también se clasifica el mejor cuarto. Quedarían así 16 equipos, que se dividen en dos cuadros separados, con semifinales y finales a partido único. Finalmente, tras las correspondientes semifinales tendrán lugar cuatro finales diferentes, cuyos ganadores ascenderán a Segunda División.
En la liguilla de ascenso y en estos playoffs, todos los equipos que vayan quedando por el camino también pasarán a formar parte de la Segunda B Pro. A ellos se les sumarán los cuatro descendidos de Segunda, de manera que la nueva categoría (desde el próximo curso el tercer escalón), tendrá un total de 40 integrantes.
El descenso de Segunda B a Tercera, sin formato oficial
Como ya hemos comentado, los últimos clasificados de cada subgrupo disputarán una fase para tratar de eludir el descenso a Tercera. Sin embargo, de todas las incógnitas que tenía esta Segunda B hace unos días, aquí se encuentra una de las que sigue sin resolver. Por el momento, se desconoce el formato elegido para esta pelea por la salvación.
Y la resolución es especialmente importante, pues esta temporada quien descienda de Segunda B perderá de golpe dos divisiones. Con la nueva categoría (que ocupará un lugar entre la actual Liga SmartBank y la Segunda B), la Tercera División pasará a ser el quinto escalón del fútbol español. Por ello, realmente incluso los equipos que se salven descenderán un peldaño, pues pasarán de competir en la tercera división a hacerlo en la cuarta.