No ha sido ni mucho menos una temporada plácida para el Deportivo en Riazor. Como local, el conjunto coruñés ha vivido un constante quiero y no puedo que le ha impedido aspirar a cotas más altas este curso. Sin embargo, en las últimas jornadas los pupilos de Óscar Gilsanz parecen haber encontrado la luz al final del túnel. La contundente victoria ante el Albacete (5-1) extendió hasta siete los encuentros invicto en su feudo, una racha que confirma la mejoría de los blanquiazules para, por fin, sellar la permanencia matemática.
Desde la derrota ante el Levante el pasado 25 de enero (1-2), el Deportivo ha cosechado tres victorias y cuatro empates en Riazor. Con 14/24 puntos posibles, el Deportivo es el décimo equipo que más puntos ha sumado en casa en esta segunda vuelta. Cifras que le han permitido caminar con tranquilidad hacia la salvación, aunque todavía lejos del rendimiento como local de los grandes ‘cocos’ de la categoría. Elche con 19 de 21, Mirandés con 22 de 24 y Levante con 20 de 27 son los tres equipos que más puntos han amarrado en su feud0 en 2025.
Eso sí, la progresión es aún más palpable si se atiende a la imagen ofrecida en la primera vuelta en Riazor. El Deportivo logró apenas sumar 13 de 33 puntos posibles en su feudo, o lo que es lo mismo, ser el tercer peor local del campeonato. Dificultades ante los suyos que se contraponían con la fiable y letal versión de los blanquiazules lejos de casa, donde hasta la fecha continúan siendo el segundo mejor visitante de LaLiga Hypermotion.
La entrada de año le ha traído al conjunto coruñés una reconciliación con los suyos que parece ir por buen camino. Y es que, como local, solo cuatro equipos cuentan con una mejor racha en la actualidad que el Deportivo. Almería (17 partidos), Mirandés (14), Granada (12) y Elche (11) superan los 7 partidos invictos de los de Óscar Gilsanz en su feudo, una marca que comparten con el Levante.
El reto que se le resiste al Deportivo en Riazor
Por otro lado, a esa consistencia del Deportivo en Riazor todavía le falta dar un gran golpe en la mesa. En el feudo blanquiazul, el conjunto coruñés no ha logrado encadenar en toda la temporada dos victorias de forma consecutiva. Es, sin duda, una de las razones por las que los de Óscar Gilsanz se encuentran lejos de coquetear con los puestos de playoff.
En esta recta final, los blanquiazules tendrán por delante en Riazor dos exigentes choques contra equipos de la zona alta como Elche y Granada. Aunque el top-6 ha sido uno de los puntos débiles este curso, el conjunto coruñés tiene la oportunidad de reivindicarse y romper con una estadística que espera no calcar para la próxima campaña.