Hace algo más de cinco años, en la temporada 2013/14, se producía en Segunda División un inesperado cruce de caminos entre Deportivo y Lugo. Los coruñeses estaban viviendo una de las situaciones más complicadas de su historia reciente, tanto a nivel económico como deportivo, habiendo entrado en concurso de acreedores y encadenando su segundo descenso consecutivo. Por su parte, los lucenses se encontraban en su momento más dulce, ya que venían de conseguir el ansiado ascenso a Segunda y en la campaña anterior habían logrado mantener la categoría con un holgado undécimo puesto. El choque se hubiera considerado extraño, casi imposible, poco tiempo atrás, con el Dépor consolidado en Primera y el Lugo atado a las profundidades de la 2ªB. Y sin embargo, aquella no era la primera vez que los dos conjuntos se encontraban en Liga.
Para encontrar el primer duelo oficial entre ambos, debemos retrotraernos a otra época aciaga y convulsa para la parroquia deportivista, los años 70. El club se había ganado el mote de “equipo ascensor” durante la década anterior, moviéndose continuamente entre Primera y Segunda. Pero a pesar de esta inestable trayectoria, el Dépor todavía mantenía cierto estatus. Por eso cuando en 1974 los blanquiazules sufren el descenso a Tercera División (todavía no existía la 2ªB), la conmoción es tremenda. Sería en aquella temporada en el infierno que se produciría el encuentro con el Lugo, un equipo más humilde y con mucha experiencia en esa categoría.
El primer partido oficial entre los dos conjuntos se produce en Riazor en la jornada 14, a la que ambos llegan muy cerca en la clasificación, con los herculinos ocupando el primer puesto y los lucenses el tercero. La victoria hubiera permitido a los visitantes empatar a puntos con sus vecinos, pero los puntos se quedarían finalmente en casa con un ajustado 2-1.
El segundo partido se disputaría en la segunda vuelta de esa misma temporada, esta vez en el Anxo Carro y cerca del final del campeonato. El Deportivo seguía aferrado al liderato, pero llegaba a la ciudad amurallada con una racha de resultados un poco más irregular que en la ocasión anterior. El Lugo, quinto en la clasificación, apenas contaba con opciones para alcanzar los puestos de ascenso, pero eso no impidió que los jugadores salieran a por todas, motivados por el gran ambiente en las gradas. Los coruñeses se hicieron con el control en los primeros compases, pero desperdiciarían todas sus ocasiones. El choque, caracterizado por la dureza en el juego, acabaría por decidirse a nueve minutos para el final, cuando el árbitro señaló un dudoso penalti a favor de los locales. Estos no desaprovecharían su oportunidad, llevándose los dos puntos por 1-0.
El resultado podría haber metido en problemas a los herculinos, pero sus buenos resultados en las últimas jornadas les permitieron conservar su puesto y recuperar un lugar en la Segunda. El Lugo mantuvo también su puesto en la tabla y continuó jugando en Tercera. Años más tarde el Dépor volvería a bajar, esta vez a la 2ªB, pero los lucenses ya no estaban esperándoles, habiendo descendido poco antes a una división inferior (la actual Tercera). Cuando ascendieron, los blanquiazules ya estaban en Segunda y cuando a principios de los 90 los rojiblancos consiguieron su primer ascenso a la categoría de plata, en Coruña los deportivistas ya celebraban victorias ante el Real Madrid y el Barcelona gracias a Bebeto y compañía.
39 años sin encontrarse en Liga
Casi cuarenta años después de aquellos igualados partidos de la 1974/75, Deportivo y Lugo volvieron a darse cita en un partido de Liga. Un reencuentro inesperado para ambas partes, pero que hacía cierta esa frase tan manida que dice que “la historia siempre se repite”.
En aquella temporada 2013/14, los dos enfrentamientos estarían caracterizados por el buen ambiente en la grada y la intensidad de juego en el campo. Y a pesar de acabar los dos partidos en tablas, ambos equipos ofrecieron un buen espectáculo al aficionado. El primero se jugó en Coruña y acabó en 0-0. El segundo, con el campeonato llegando a su conclusión, se disputó en el Anxo Carro y acabó con un 2-2 en el que los locales fueron capaces de dar réplica a los dos goles de Insua e Ifrán. El Deportivo acabaría segundo la temporada logrando su objetivo de volver a Primera de la mano de Fernando Vázquez, mientras que los lucenses mantendrían la categoría un año más bajo las órdenes de Quique Setién, afianzándose como equipo de Segunda.
Cinco temporadas más tarde, este domingo, el destino vuelve a cruzar los caminos de Lugo y Dépor. De nuevo cada uno cuenta con un objetivo diferente, los herculinos tratan de meterse en los puestos de ascenso directo, mientras los rojiblancos buscan poner tierra de por medio con la zona de descenso.