No podía ser otro. Tras su enésima despedida en redes sociales, si había un elegido para marcar el gol de la remontada tenía que ser Emre Çolak. El Deportivo jugó la mejor primera parte del regreso al «nuevo fútbol» y también la peor segunda mitad. Cuando parecía todo perdido, la Ponferradina marcó en propia puerta y el turco hizo lo propio en la última jugada.
Emre Çolak no fue titular ante la Ponferradina. El turco no está excesivamente entonado desde el regreso de la competición, y eso le está penalizando tanto a él como al equipo que no puede aprovecharse de su calidad. Saltó en la segunda mitad, con Christian Santos y Vallejo para intentar darle más mordiente a los de Fernando Vázquez.
Un par de paredes y poco más eran el bagaje de un Emre Çolak que no estaba siendo diferencial ante la Ponferradina. La idea era darle un poco más de claridad al equipo y buscar líneas de pase entre Christian Santos y Sabin Merino. Además, había otros futbolistas en el campo como Aketxe o Vallejo con los que asociarse.
En un abrir y cerrar de ojos, el Deportivo pasó de prácticamente estar derrotado a firmar una remontada vital para la salvación. Dos goles en un suspiro y una celebración de un futbolista diferente, de esos a los que quieres o detestas. Entre tanta despedida, el de hoy puede ser uno de los últimos goles del turco.