Sin los Riazor Blues y ante menos de 10.000 espectadores, los de Víctor Fernández fueron superiores al Málaga pero no pudieron pasar del 1-1 debido a su falta de definición en ataque.
Con la grada de Maratón Inferior vacía, una floja entrada en general y un ambiente enrarecido desde un minuto de silencio que fue anunciado como «en contra de la violencia» y respondido con cánticos de «Tino dimisión», arrancó en Riazor un partido sin duda marcado por los acontecimientos de los últimos días. En el que era su estreno en la Copa del Rey 14-15, Víctor Fernández decidió apostar por un once completamente distinto al que había formado en el Calderón para recibir al Málaga, manteniendo eso sí el sistema de tres centrales y dos carrileros. Esta vez, las bandas fueron para Laure y Canella y en el centro de la zaga Manuel Pablo acompañó a Lopo y Diakité.
Precisamente fue Diakité, que en las últimas semanas fue situado lejos de A Coruña a partir de enero por varios medios de comunicación, el gran protagonisTA de la primera mitad con sus arrancadas desde atrás, que le llevaron a anotar un gol anulado por dudoso fuera de juego. Además, abriendo mucho el campo por las bandas y encontrando con relativa facilidad a Juan Carlos e Isaac Cuenca en tres cuartos, el Dépor consiguió llevar el peso del encuentro y generar varias ocasiones claras. La más peligrosa la sacó Ochoa ante Toché después de un gran pase de Bergantiños a la espalda de la defensa. Sin embargo, el gol lo puso el Málaga prácticamente en su primera llegada al área de Germán Lux: tras un balón parado desde al derecha, Camacho se impuso por arriba en el punto de penalti y cabeceó a la red.
A la vuelta del descanso, todo continuó parecido a la primera parte, con Diakité yéndose al ataque desde atrás y Ochoa desbaratando ocasiones de los coruñeses. Tras veinte minutos en los que el dominio local parecía disminuirse, Víctor Fernández decidió mover el banquillo para dar entrada a José Rodríguez, que se situó como carrilero diestro, y a Marcos Remeseiro, que realizó su debut oficial con el primer equipo.
Y prácticamente en la acción posterior llegó el empate. En un córner que había puesto el fabrilista desde la derecha y tras varios rebotes, Diakité la ganó por arriba y Toché apareció en boca de gol para, esta vez sí, batir al mexicano Ochoa. Con el 1-1 en el marcador, siguió dominando la posesión el Deportivo pero apenas fue capaz de generar más llegadas claras ante un Málaga muy replegado en su propio campo.
Con la misma falta de gol preocupante de las últimas jornadas pero con un juego fluido y la sensación de que el sistema de tres centrales cada vez está más interiorizado, finalizó el Dépor el partido de ida de una eliminatoria que se resolverá en La Rosaleda dentro de quince días. Antes, el próximo sábado en Riazor y ante el mismo rival, los herculinos tendrán que seguir peleando en su objetivo principal: escapar del descenso en la Liga BBVA.
Ficha técnica:
Deportivo: Lux; Laure (José Rodríguez, min. 65), Diakité, Lopo, Manuel Pablo, Canella; Álex B., Juan Domínguez; Isaac Cuenca, Juan Carlos (Remeseiro, min. 65); y Toché.
Málaga: Ochoa; Rosales, Angeleri, Weligton, Boka; Camacho, Juanpi (Recio, min. 68); Samu (Castillejo, min. 60), Luis Alberto (Portillo, min. 79), Horta; y Rescaldani.
Goles:0-1, Camacho. 1-1, Toché, min. 68.
Árbitro: Mateu Lahoz, del comité valenciano. Mostró tarjeta amarilla a Angeleri, Rosales, Diakité y Toché.
Incidencias: Partido disputado en Riazor ante 9,988 espectadores correspondiente a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey 14-15. Antes del comienzo del mismo se guardó un minuto en contra de la violencia en el fútbol.