El Deportivo comenzó a preparar esta mañana el partido ante el Langreo del próximo domingo (17:00h, Footters) y lo hizo con toda la plantilla a disposición de Rubén de la Barrera. Tan solo Derik Osede, lesionado de larga duración, se ausentó del trabajo con el grupo llevado a cabo en la ciudad deportiva de Abegondo.
Borja Granero, que tuvo que ser sustituido en la segunda parte contra el Marino de Luanco, se entrenó con normalidad. También lo hicieron Keko Gontán y Mujaid Sadick, que el lunes no habían saltado al césped en la sesión de recuperación. En el día de hoy, de la Barrera citó a los fabrilistas más habituales para trabajar con el primer equipo, Adri Castro y Pablo Brea, para completar un grupo de 23 futbolistas.
Pese a que el domingo visitará un campo de césped artificial como el Nuevo Ganzábal, el cuerpo técnico optó por ejercitarse en sus instalaciones habituales de hierba natural. De esta forma, mañana jueves la sesión será a puerta cerrada en el Estadio de Riazor (10:30h) para regresar ya el viernes a la ciudad deportiva de Abegondo.
Pablo Brea dio el susto de la mañana
El portero del filial fue el protagonista negativo de la mañana al dar el susto en el rey de pista final de cada miércoles. Tras recibir el pase de un compañero, Brea pisó mal al querer controlar y cayó al suelo con gritos de dolor que hicieron saltar todas las alarmas y provocó mucha preocupación en el resto de compañeros por una posible lesión grave de rodilla. Sin embargo, el guardameta pudo levantarse por su propio pie después de unos minutos y se retiró a los vestuarios acompañado por los médicos Carlos Lariño y Moncho Barral.