El triunfo del Deportivo ante el Tenerife no solo supuso el fin a cuatro meses sin ganar, significa también que los de Luis César terminan 2019 recortando dos puntos con la salvación. Los resultados de los rivales por la permanencia y los enfrentamientos directos dan algo de aire a los coruñeses.
Aunque el Deportivo cierra la primera vuelta de Segunda División como colista, con 15 puntos en 21 partidos, en estos momentos está a siete de la permanencia y a tres del antepenúltimo. Sobre el papel no se podría ver nada positivo en estos registros, pero teniendo en cuenta la temporada del conjunto coruñés, el desenlace de esta jornada ha arrojado un poco de optimismo para la afición blanquiazul.
Los empates entre Málaga y Lugo, con un gol del canterano Carlos Pita en el minuto 100 de partido, y Racing y Oviedo, hacen que la zona baja se apriete tremendamente. El Dépor recorta dos puntos a los puestos de permanencia, que marcan Lugo, Oviedo y Málaga con 22, reduciendo la distancia de nueve a siete. Un precedente reciente para la ilusión es el Córdoba de la campaña 2017/18, que terminó la primera vuelta con 16 puntos, a siete también de los puestos de salvación, y acabó logrando quedarse en Segunda un año más.
Además, en cuanto a los rivales de la propia zona de descenso, el empate del Racing sirve para que los coruñeses se queden a tres puntos, un partido, del penúltimo lugar. Curiosamente, los cántabros serán el primer equipo que visite Riazor en el próximo año 2020. A cuatro puntos se queda como antepenúltimo el Tenerife, último rival del equipo herculino; y a seis el Extremadura, que, tras haber vencido en Gijón, es el primero en la cola por abandonar la zona de descenso.