El Cartagena llega a Riazor este domingo (18:30) consciente de la situación que atraviesa. Como su propio entrenador, Fernández Romo, aseguró en rueda de prensa, se trata de algo inusual en el mundo del fútbol. «A veces, intentando hacer las cosas mal, no te salen tan mal», respondió en relación a la racha de resultados que llevan donde han sumado nueve derrotas consecutivas.
La semana que ha vivido el Cartagena
«Ha sido una semana dura. No nos engañemos. Por la regularidad de las derrotas, todo se lleva con dificultad y mucha dureza. Somos un equipo que está perdiendo todos los partidos que juega. Pero eso no significa que seamos un equipo perdedor. Si algo tenemos claro, es que somos un grupo ganador.
Todos los días venimos con la mejor voluntad, con la idea de mejorar, y gracias a eso el día a día del grupo va creciendo. Es cierto que no lo estamos relacionando con resultados positivos, pero ese trabajo nos da la firmeza necesaria para que, cuando llegue el siguiente partido, nos sintamos preparados de verdad para competir y hacerlo lo mejor posible.
Ha sido una semana dura para el cuerpo técnico y para los jugadores. Hemos tenido a cuatro futbolistas entre algodones, que viajarán pero están con molestias. A eso hay que sumarle los cinco internacionales, la sanción de Sergio Herrero y las bajas de Gastón, Luis y Jorge. Encajar todas esas piezas no es fácil. Pero cuando hay buena voluntad, todo suma. Hemos recibido mucha ayuda de los jugadores del filial. Tras su entrenamiento, subieron convencidos de que podían aportar en una semana complicada.
Nos queda matizar la alineación del domingo y competir de la mejor manera posible».
Ante las bajas, el Cartagena ha tenido que recurrir al filial
«Hablé con los jugadores del filial. No es lo mismo cuando están todo el año con nosotros, como Carmelo, Lázaro o Jesús, que cuando, como miércoles y jueves, se incorporan más chicos para ayudarnos. Llegamos a tener once jugadores del filial en el entrenamiento, lo cual fue una ayuda muy importante.
Les fui sincero. Los momentos en los que entrenan con el primer equipo deben partir siempre de la idea de ayudar, de tener buena actitud, de escuchar. Estamos en una situación mentalmente muy difícil, y cuando un chico sube con ilusión y ganas, debe entender también el estado emocional en el que estamos nosotros. Y la verdad es que lo han hecho muy bien».
El Cartagena en la parte psicológica
«Es una situación inusual. A veces parece que, incluso haciendo las cosas mal a propósito, no te saldría todo tan mal. Pero no nos estamos machacando. Somos profesionales, y sabemos que esto puede pasar. La única manera de darle la vuelta es seguir haciendo lo que toca».
Jugar en Riazor con otro ambiente
«Tenemos que ir a cualquier escenario sabiendo lo que es el fútbol y lo que se decide en cada partido. Más allá de que podamos estar muy exigidos, tenemos que afrontar cada encuentro con mucho valor, tanto a nivel individual como profesional, y con la convicción de que podemos ganarlo, sea cual sea el escenario.
Está claro que jugar en un buen campo te puede motivar más. Pero lo que realmente te golpea es cuando en tu propia casa el ambiente no es el mejor. Eso sí duele».