Este domingo el Deportivo se reencontrará con dos ex. El equipo de Imanol Idiakez se enfrenta a un Nàstic de Tarragona que lidera la clasificación en estos momentos, y lo hace con la necesidad de conseguir tres puntos con los que seguir escalando desde la zona baja. Enfrente estarán dos ex con un paso efímero por el club, Gorka Santamaría y Pablo Trigueros.
Los seis meses de Gorka Santamaría en el Deportivo
Gorka Santamaría llegó al Deportivo tras cuajar una gran temporada en el Badajoz, donde había marcado 15 goles. Tras convertirse en el primer fichaje de la 22-23, asumió el rol de goleador del equipo. Algo que finalmente no se cumplió.
Trece partidos después y un partido de Copa del Rey, Gorka Santamaría se despedía del Deportivo. Lo hizo tras el anuncio del club de rescindir su contrato, pudiendo así fichar posteriormente a Lucas Pérez que regresó a la entidad procedente del Cádiz.
En una entrevista concedida a Radio Marca Coruña, dejó claro que «me dolieron las formas de cómo prescindieron de mí, el resto es fútbol, el míster no contaba conmigo y no me ayudaba el sistema del equipo, no guardo rencor a nadie, yo tampoco estuve al nivel deseado. Lo único que digo es que tengo muchas ganas de volver a Riazor, tengo ganas de saludar a los amigos y a los ex que dejé allí. No brillé cuando fui deportivista, eso es cierto».
Tras el Dépor volvió al Badajoz, donde marcó 4 goles en casi una veintena de partidos aunque descendiendo a final de temporada. Ahora defiende los colores del Nàstic, donde ha sido titular en dos de nueve encuentros, sin estrenarse como goleador.
Pablo Trigueros, un fijo en el Nàstic
Pablo Trigueros es la otra cara de la moneda. Estuvo una temporada en el Deportivo donde tampoco terminó de asentarse, disputando tan solo 8 partidos, siendo titular en la mitad de ellos. De A Coruña pasó a León, siendo uno de los líderes de la defensa de la Cultural Leonesa: 31 partidos jugados, 26 como titular y 2 goles. Este año en el Nástic ha sido titular en los nueve partidos, marcando ya dos tantos.
Se reencuentra ahora con un Deportivo en el que de su temporada tan solo quedan Mackay, Jaime y Villares. Lo hará con el objetivo de frenar los arreones del equipo de Imanol Idiakez, que busca mejorar sus registros en Riazor.