El Dépor Abanca se enfrenta al Granada (hoy, 12:00 horas) en un duelo directo por el ascenso que llega en el momento más delicado de la temporada. Irene Ferreras ha reconocido que esta semana el equipo ha tomado algo de distancia con la situación para cambiar de rumbo: «No llevamos buenas jornadas de juego, sé que no estábamos encontrándonos cómodas. Pero es importante saber por qué. Confianza, tensión… el equipo necesita otro tipo de estímulos. Veo actitud por parte de las futbolistas, quieren y están comprometidas, pero muchas veces insistimos en el mensaje de que es una oportunidad que no podemos desaprovechar y no nos damos cuenta de que ellas viven en eso cada día. La clave está en volver a reconectar con estas sensaciones, jugar bien al fútbol, y esa manera es el mejor camino para que los resultados nos den la razón. En esos momentos de dificultad, las futbolistas necesitan jugar al fútbol sin olvidar que se pueden divertir. Estar presentes en el momento y no en si necesitan ganarlo sí o sí».
Por eso la entrenadora blanquiazul no se fija tanto en si el duelo es una final o no: «Es ese momento en el que tenemos muchas ganas de volver a sentirnos bien jugando, de envolvernos con nuestra afición. Final o no final… sé perfectamente que ganemos, perdamos o empatemos, vamos a tener que continuar porque no está todo dicho. Nos tenemos que centrar en jugar bien al fútbol, tener la pelota y conectar con nuestras fortalezas. No meternos presión extra. Cada vez que hemos sentido que era una final, luego nos hemos dado cuenta de que no lo era y que estando más tranquilas hubiéramos jugado mejor«.
Afirma que ella misma ha cambiado el enfoque esta semana: «Ellas son lo más importante. Nosotros vivimos nuestra película desde nuestro prisma. Soy muy exigente conmigo y mi entorno. A lo mejor ellas necesitaban un poco más de apoyo y menos tensión. Hemos hablado, las he escuchado… cambiamos dinámicas de entrenamiento, más diversión, que se sientan cómodas… para mí ha sido bonito adaptarme y tengo que ser la entrenadora que ellas necesitan».
Igualdad en el tramo final
De todas formas, Irene Ferreras explicó que es algo que le está sucediendo a todos los equipos que pelean el ascenso: «Me imagino que la igualdad se mantendrá hasta el final. Es un momento en el que los de abajo compiten como bestias porque se juegan la categoría. Y los de arriba, que llevan todo el año peleando por un objetivo dificilísimo, a nivel emocional esas cosas pesan. Juegas los partidos más congestionado mentalmente. Nos pasa a nosotras y a todos. Vamos a intentar darle la vuelta a eso».