Saltaba la sorpresa con la alineación. El Deportivo se mediría al Eibar en Riazor con una principal novedad: llegaba el debut de Koval. El ucraniano saldría de inicio por primera vez desde su llegada a A Coruña en un encuentro vital en la pugna por la permanencia. Quinto portero deportivista esta temporada, algo que no ocurría desde el Málaga de la 2010/11 que curiosamente contaba con Rubén en sus filas.
Una posición tan controvertida como la portería necesitaba aire fresco. Seedorf lo aclaró al final del partido: «He optado por un cambio en la portería por un tema de coraje más que técnico». Los errores de Rubén mantenían en constante incertidumbre una zona que debe contar con la máxima seguridad posible. Maksym Koval era el elegido para revertir la situación. Sin embargo, no sería la tarde soñada para el ucraniano.

Muy sobreexcitado, el guardameta cometió un error de bulto en el gol visitante. Gran jugada de Charles, que envió al espacio un gran balón a Orellana por la derecha. El chileno centró raso al área y Koval salió a por el esférico sin éxito. No consiguió alcanzarlo e Inui, a placer, empujó la pelota para adelantar a los suyos. El Deportivo ya perdía en el minuto 11 y su guardameta quedaba en evidencia.
El debut de Koval terminó antes de lo esperado
Tras el tanto de Inui, poco trabajo para Koval, que tuvo que preocuparse de salvar un gol de su propio compañero. Mal despeje de Sidnei que se envenenó hacia la portería. En esta ocasión sí estuvo acertado el ucraniano para despejar el balón. No obstante, en el minuto 39 llegaría a su fin el debut del que aterrizó en A Coruña en invierno para salvar la portería deportivista.
Inexplicable jugada defensiva del Deportivo en la que, una vez más, intervino el error individual. Pase dirigido a Albentosa, el cual decidió dejar a Koval. El ucraniano no se enteró y salió tarde, teniendo que despejar con el pie y salir fuera del área tras el balón, lo que le llevó a realizar una entrada muy dura a Jordán para evitar el segundo gol visitante. Cartulina roja directa que llevaba al deportivismo a la incredulidad. Treinta y nueve minutos duró el nuevo portero herculino sobre el césped. Maksym Koval tendrá que esperar su turno dentro de dos semanas, pues será baja para el compromiso en Girona.