Augusto César Lendoiro se pasó por los micrófonos de Deportes Cope Coruña y concedió una entrevista en la que analizó toda la actualidad que rodea al Deportivo. El anterior mandatario dio su opinión sobre el inminente proceso electoral del que saldrá elegido el nuevo presidente de la entidad herculina, se lamentó por el reciente descenso a la Liga 1|2|3 e incluso tuvo tiempo para recordar el grave problema de salud al que se tuvo que enfrentar durante el pasado mes de marzo y del que afortunadamente está totalmente recuperado.
Precisamente sus primeras palabras hicieron referencia a la dolencia cardíaca por la que tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica, su posterior proceso de recuperación y el actual estado de salud. “Fue una lucha a vida o muerte, cuarenta días en la UCI. Pero me han dejado como nuevo”, señaló un Lendoiro que dijo sentirse “eternamente agradecido” por los cuidados y el trato recibido durante su estancia hospitalaria.
“En términos mecánicos hablaríamos de que me han hecho de todo. Chapa, pintura y hasta un poco el tapizado”, así resumió el expresidente deportivista su paso por el hospital. Al mismo tiempo reconoció que la gravedad de lo ocurrido le ha “obligado” a modificar su día a día. “Tienes que hacer rehabilitación, las curas, los controles”, señaló justo antes de recurrir una vez más a su habitual sentido del humor. “Digamos que yo siempre tuve turno de noche y ahora tengo turno de día”.
Sin embargo la mayor parte de la entrevista giró en torno al proceso electoral en el que todo indica que el actual presidente, Tino Fernández, y Miguel Otero serán los dos candidatos que se disputarán la presidencia del Deportivo. “Cuando hay elecciones siempre se pueden producir cambios”, apuntó un Lendoiro que a su vez reflexionó sobre la dificultad de que eso se llegue a producir debido a los cambios surgidos en el accionariado a raíz de la reciente ampliación de capital llevada a cabo. “Los accionistas mayoritarios han pasado a tener un peso específico importantísimo, pero siempre está bien abrir las ventanas al deportivismo, y más aún en momentos de una fractura social importante”.
Una de las grandes dudas que sobrevuelan la carrera presidencial es el papel que pueda desempeñar el expresidente deportivista, al que se relaciona con la candidatura de Miguel Otero hasta el punto incluso de señalarlo como uno de sus posibles consejeros. Cuestionado al respecto, evitó pronunciarse con claridad, aunque dejó abierta la puerta a un posible regreso. “Estoy muy bien en todos los aspectos y tengo mucha ilusión de poder ayudar”, afirmó un Lendoiro que no dejó pasar la ocasión de mostrar su disconformidad con el modo de proceder del actual consejo de administración en algunas decisiones de gran trascendencia para el Deportivo. “Me duele que hayan pasado cinco años y no me hayan llamado ni una vez desde el club para decirme ¿qué opinas de esto?”.
En lo estrictamente deportivo lamentó el descenso a Segunda y subrayó la importancia de permanecer en la máxima categoría de cara a la estabilidad del club. “Lo único importante en el fútbol es estar en Primera. Eso es lo que marca las posibilidades económicas del club”. De ahí la importancia de lograr el ascenso cuanto antes, un objetivo para el que afirmó que es preciso “contar con un gran equipo”.
Lendoiro echó la vista atrás y recordó lo sucedido las dos últimas veces que el Deportivo compitió en Segunda División, dos situaciones diametralmente opuestas en lo económico y que condicionaron sobremanera la confección de la plantilla del último ascenso. “El primer año teníamos un presupuesto casi de Primera y dije de aquí no se mueve nadie. Podíamos haber traspasado a Guardado por tres, cuatro o cinco millones, pero yo anteponía el hecho de ascender«, sentenció.