Tres minutos y medio. Eso era lo que quedaba para la conclusión del tiempo reglamentario cuando el Deportivo encajó el 2-2 ante el Sevilla y comenzó a perder un partido en el que mandó en el marcador durante más de 85 minutos. El gol de Ryan Babel nada más comenzar y el de Florin Andone al filo del descanso pusieron las cosas de cara para los blanquiazules, pero el primer error fatal se produjo precisamente en ese instante. No se aprovechó la ocasión de asestar una dolorosa estocada al conjunto andaluz, obligándole a irse al vestuario con un demoledor 2-0 en contra. Eran además dos tantos psicológicos, pero probablemente lo fue más todavía el 2-1 de N’Zonzi, que pilló al Dépor poco menos que festejando la fabulosa diana de Florin.
El empuje de los de Jorge Sampaoli hizo que los herculinos defendiesen cada vez más cerca de Tytoń en la segunda parte. Babel, que en la primera mitad había acompañado a Andone en la delantera, no sólo se colocó como extremo izquierdo, sino que retrasó su posición hasta convertirse prácticamente en lateral, situándose por tanto Luisinho como improvisado central izquierdo. Las ayudas eran tarea de Bruno Gama, Mosquera y Borges, dos pasos por delante de la defensa. Guilherme era, tras Florin, el primero en salir de la cueva para presionar.

Para entonces, Celso Borges ya había sustituido a Emre Çolak. El cambio más cuestionado de cuantos realizó Gaizka Garitano fue el segundo, con el que introdujo en el campo a Arribas y sentó a Juanfran. Lo primero que pasó por la mente del aficionado deportivista fue que el carrilero tendría algún problema físico, lo segundo que el central entraría para colocarse junto a Albentosa y Sidnei, dejando las bandas para Bruno Gama y Luisinho. Pero sorprendentemente Arribas se ubicó de lateral en la zona en que el Sevilla estaba haciendo más daño, el costado izquierdo de su ataque, con Escudero y Vitolo ejerciendo de puñales. Quizá de manera inconsciente, el zaguero vigiló al extremo canario desde más lejos, como tendiendo a irse a su posición habitual. Del mismo modo que venía ocurriendo en la otra banda, Bruno (visiblemente cansado, como Ryan) terminaba incrustado como lateral. Con el oxígeno justo, el Deportivo defendía por momentos casi con un 6-3-1.

No es menos cierto que los hispalenses asfixiaban metiendo muchos futbolistas por delante de la pelota, en la frontal del área, como ocurrió en la acción que supondría el 2-2. Todo empieza con un mano a mano de Ben Yedder, que llega a superar a Tytoń y gana posición franca de remate, por lo que Albentosa y Arribas se colocan sobre la línea de gol para resguardar el arco. El primer remate claro lo hace Mercado y lo saca Sidnei, el segundo rechace le cae al ‘Mudo’ Vázquez, que se mete en el área y trata de asistir a Luciano Vietto. El ex del Atlético burla la marca de Arribas, pero no llega por muy poco y permite que Albentosa despeje.

Como se puede observar en las imágenes, las circunstancias provocan que Albentosa y Arribas mantengan su intercambio de posiciones, por lo que el temible Vitolo acecha ahora a la espalda del de Alzira. El Sevilla sigue manejando la posesión y ya tiene hasta siete jugadores pisando la línea del área del Dépor. Abundan las opciones de pase primero para N’Zonzi y después para Kranevitter, que además no son presionados por los pivotes coruñeses y tienen tiempo para pensar. El mediocentro argentino no duda en colgar el balón hacia un espacio en que hasta tres compañeros suyos se mueven entre Luisinho y Babel, alejados entre sí y también sin apoyo de otro centrocampista.

Franco Vázquez la deja de cara para Vietto, a pesar de tener encima a Luisinho. Contra el portugués va el chut del delantero, pero el Sevilla tiene más jugadores en ese punto del terreno y por enésima vez se adueña del rebote. Mariano controla, piensa y encuentra sin dificultades a Ben Yedder, que penetra y trata de disparar. La mala fortuna hace que lo que era un chut se convierta en una asistencia perfecta para Vitolo. Sidnei desvía la pelota, Arribas no reacciona a tiempo y el canario aparece completamente liberado por detrás de Albentosa.


El 2-3 se produce en una acción mucho más rápida, un córner en el que el exhausto Babel habilita a Mercado en el interior del área pequeña. Las imágenes sugieren que la primera línea de marcadores del Deportivo toma como referencia el borde de ese área, pero el holandés, menos activo, pisa dentro con ambos pies. Así, después de que Mercado saltase sin éxito para intentar rematar, es el estatismo de Ryan lo que hace que la posición en la que cae no sea ilegal. Por eso puede cazar el cuero y empujarlo fácilmente a las mallas, tras rematar casi de cualquier forma Nico Pareja en el punto de penalti.
