Miércoles de regreso al trabajo para el Deportivo con el objetivo de empezar a sacarse el mal sabor de boca que dejó la derrota ante la Cultural Leonesa. El Celta B llega a Riazor como el mejor equipo de la segunda vuelta y Óscar Cano tendrá que preparar el partido sabiendo que no contará con Roberto Olabe y vigilando el estado físico de unos Lucas Pérez y Antoñito que arrancan la semana entre algodones.
Ni el delantero ni el lateral se dejaron ver por el césped de Abegondo en la primera sesión de trabajo del cuadro deportivista. Los dos fueron titulares en León y los dos jugaron prácticamente el partido completo – Lucas disputó los 90 minutos y Antoñito fue sustituido por Svensson en el tramo final -, pero el físico les ha mandado un aviso.
Ambos se quedaron en el gimnasio haciendo «entrenamiento personalizado», como ha apuntado el club, que no ha dado más detalles sobre el estado de los futbolistas. Su evolución en los próximos días dirá si pueden jugar el domingo en Riazor en un partido que se presume decisivo para el desenlace de la temporada.
Segunda semana con ‘mimos’ para Antoñito
La intención de los servicios médicos es no perder a ningún jugador por problemas musculares para el tramo final de liga, aunque eso suponga rebajar la carga de entrenamientos durante la semana. De hecho, Antoñito ya se pasó al margen del grupo la semana previa a la visita a la Cultural, aunque finalmente llegó a tiempo. El lateral está además apercibido de sanción y la próxima amarilla le obligará a descansar.
El resto de la plantilla, a excepción del citado Olabe por sanción, está disponible para Óscar Cano después de las recientes recuperaciones de Jaime, Kuki Zalazar y Svensson, estos dos últimos ya con minutos recientes tras salir de la enfermería.