El ariete deportivista no saltó finalmente al césped en el duelo disputado en Old Trafford. Un gol de Raphaël Guerreiro en los últimos minutos del encuentro certificó el triunfo luso.
La selección portuguesa de Fernando Santos continúa su particular recomposición. El técnico lisboeta, que tomó el mando del combinado lusitano el pasado mes de septiembre, prosiguió en la noche de ayer con sus pruebas ante la Argentina de Lionel Messi. Con un tridente inicial conformado por Cristiano Ronaldo, Danny y Nani en el frente de ataque, el delantero del Deportivo Hélder Postiga quedó relegado al banquillo, una circunstancia que no varió en la segunda mitad, en la que Santos decidió dar minutos a Éder y Quaresma como hombres de refresco.
Postiga, que sí disfrutó de la titularidad en el encuentro disputado por Portugal ante Armenia el pasado 14 de noviembre, vio así desde un segundo plano cómo la selección del país vecino se alzaba con un postrero triunfo en el minuto 91 de partido. Cristiano Ronaldo y Messi, sustituidos en el descanso, dejaron el protagonismo para actores secundarios como Raphaël Guerreiro. En su segunda internacionalidad, el joven lateral izquierdo del Lorient entró a comienzos de la segunda parte y decantó la balanza final a favor de los lusos tras rematar en el área pequeña un buen centro de Quaresma.
Con la victoria ante el equipo de Gerardo Martino, Portugal acumula un total de tres victorias -ante Dinamarca, Armenia y Argentina- y una derrota -ante Francia- desde la llegada de Santos. El protagonismo de Postiga, que únicamente fue convocado para las citas ante el combinado caucásico y la albiceleste, se ha visto reducido a un total de 56 minutos desde el nombramiento del extécnico de Grecia, que ha optado por dar oportunidades a futbolistas como Éder, Quaresma -que vive una segunda juventud desde su retorno al Oporto- o Danny, un jugador con facilidad para adaptarse a la línea de tres cuartos y al puesto de falso nueve.