Rafa de Vicente volvió a Riazor. El centrocampista, que estuvo la temporada pasada en las filas del Deportivo, defiende ahora los colores del Sanse. Analizó el partido que disputó su equipo así como destacó la parada de Ian Mackay a Arturo como la clave del encuentro.
Su visión del Deportivo – Sanse
«Tuvimos ocasiones en la primera parte. La de Arturo que saca Mackay abajo, me parece una jugada clave del partido. La que tuvimos en la siguiente jugada, un córner que se nos va por poquito también. En ese tramo tuvimos buenas ocasiones que si nos ponemos por delante se hubiese complicado el partido para el Deportivo, pero hay que materializarlas. Nos vamos con la sensación, después de hacer nuestro análisis, hemos hecho muchas cosas bien. Es uno de los partidos más completos que hemos podido hacer. Nos faltaron cosas, que corregiremos esta semana, te vas con el mal sabor de boca de no haber podido rascar un punto».
El planteamiento del Deportivo
«Tratamos de parar el juego del Deportivo, la parte más fuerte es cuando mete esos balones por dentro, buscamos cerrar esos carriles. Dejan más huecos a los laterales, pero nosotros en defensa ahí somos fuertes. Me esperaba un partido así, con un Depor que fuese a por el partido y me gustó».
Un Deportivo muy junto en el centro del campo
«Ellos se juntaron más en el centro del campo. Nosotros tratamos de hacer eso, cerrar los pasillos centrales. El giro de Quiles es muy peligroso. Soriano cuando se mete hacia dentro es muy peligroso ahí. Fue mérito nuestro, lo trabajamos durante la semana».
El trabajo defensivo del Deportivo
«El último tramo del partido, nosotros estamos muy volcados, tampoco generamos demasiadas ocasiones para estar tan volcados. Eso es mérito del Dépor. Aunque tengas buenos jugadores, buena plantilla, son pequeños detalles los que te hacen llevarte un partido. Nuestra ocasión más clara con Arturo, la siguiente que no entra, después llega Quiles y la enchufa. Eso son detalles que te marcan los partidos. Puede que recordara algún partido del año pasado, de ganar 1-0 con resultado corto y defendiendo al final. En Primera RFEF todos los equipos hacen eso, es muy raro encontrar resultados abultados».
El regreso a Riazor
«Es bonito. Normalmente cuando vuelves a jugar, a enfrentarte a un exequipo, tienes esa sensación de que es tu gente, que ha sido tu club. Has vivido muchas experiencias, yo viví cosas mu bonitas y un final bastante doloroso, pero ha sido un año muy intenso. Estás muy pegado a la gente del club, a la afición. Cuando llegas al campo, llegar por la playa de Orzán… es muy bonito. Cuando te metes en el campo, ya te olvidas».
La presión del Deportivo
«Puede ser que en ocasiones, quizá se fallen pases o haya imprecisiones por tener un poco más de tensión. Esa pequeña frustración de que las cosas no terminan de salir bien. Es normal, los clubes grandes es lo que tienen, más repercusión. Lo bonito siempre se lleva al máximo exponente y todo se vive con mucha más fuerza. Pero cuando las cosas no van bien de todo, es cuando hay que intentar transformar la presión en motivación. Es difícil. Cada uno es de su padre y de su madre, cada uno es un mundo y una situación personal distinta. Lo hablábamos el año pasado, somos futbolistas, pero también somos personas y cada uno tiene sus circunstancias. Para mí, creo que no hay duda que el equipo saldrá adelante, tiene una plantilla muy buena. Tendrá que estar arriba».
El verano de Rafa de Vicente
«Estoy cogiendo poco a poco al forma. El último partido que jugué 90 minutos fue hace mucho, al final de marzo. Tanto el ritmo, como el máximo nivel o rendimiento que puedo dar todavía no está cerca. Estoy en proceso. Después del verano, que ha sido largo, no tienes pretemporada, hacía dobles sesiones pero por mucho que las hagas el ritmo te lo da el balón. Cuando llegué veía el balón cuadrado, eso se nota. Tienes que ir cogiéndolo poco a poco. Ahora estoy muy bien, muy contento. El grupo es muy bueno. La gente desde que llegué aquí me ha acogido fenomenal, estoy disfrutando otra vez».
El fichaje tardío por el Sanse
«Firmé a mediados de septiembre. Se han dado muchas circunstancias. Primero, el mercado este año ha sido un poco raro. Había algunos proyectos que a principio todavía no sabían muy bien hacia donde iban, entonces optas por esperar un poco. De pronto hay muchos fichajes, una parte del verano que esta todo más parado. No me veía firmando el 17 de septiembre, para mi también ha sido raro y sorprendente. Muchas veces son las circunstancias que no puedes controlar. No puedes hacer nada, más allá que durante el verano recibí llamadas, hablé con varios equipos, pero después por lo que sea no se terminó de materializar. Complicado y raro, así ha sido el verano. Siempre trato de ver lo positivo y o bueno, seguro que venir aquí me va a traer algo bueno».