Iván Sánchez Rico ‘Riki’ afronta el final de su carrera como futbolista a sus 35 años. Tras disputar seis campañas como jugador blanquiazul –en las que anotó 39 goles- y un breve paso por el Granada, el delantero ha vivido durante la última temporada una nueva experiencia como jugador del Club Deportivo Guadalajara, de la Segunda División B. Desde Riazor.org hablamos con él para repasar el final de su etapa como jugador deportivista y los siguientes pasos que ha afrontado en su carrera.
Tras jugar en Primera División con Getafe, Deportivo y Granada, ¿Cómo ha sido esta nueva etapa en Guadalajara?
Ha sido complicada. Firmé el último día de mercado de fichajes, no pude coger el ritmo en todo el año por culpa de las lesiones… en definitiva, no he tenido regularidad. Tenía ilusión por seguir jugando después de haber contado con pocas oportunidades en Granada, pero las cosas no han salido como yo quería. El club tampoco ha puesto mucho de su parte, hemos tenido cambios de entrenador, problemas de pagos… cosas que pasan en el fútbol.
Has compartido vestuario con un futbolista salido de la cantera del Deportivo, Dani Iglesias. ¿Qué opinion tienes de él?
Es un chico muy joven con mucha proyección. Este año ha jugado bastante –sobre todo al principio de temporada- y ha conseguido marcar goles durante ese tiempo. Ahora en el último tramo ha jugado menos, pero tiene un gran futuro por delante.
¿Cual es el siguiente paso que tienes en mente para tu carrera? Una última aventura en los terrenos de juego, quizá la posibilidad de entrenar…
Mi etapa como jugador se está terminando, aunque lo echaré de menos. Por lo pronto mi objetivo es terminar el curso de entrenador y de director deportivo que estoy realizando aquí en Madrid. Después será cuestión de moverme por dónde he sido querido y echar una mano donde me necesiten. Ahora mismo estoy disfrutando de las vacaciones, habrá tiempo para analizar la situación.
La semana pasada se cumplieron cuatro años del partido contra el Huesca en el que se consiguió el ascenso a Primera División. Fuiste uno de los protagonistas. ¿Qué recuerdo guardas de aquello?
Fue una temporada muy dura y muy sufrida porque Celta y Valladolid apretaron y tuvimos que hacer muchos puntos para conseguirlo. Sabíamos que era muy importante para el club ascender y lo conseguimos con el apoyo y el cariño de la gente. Nos quitamos un peso de encima por ellos.
La temporada siguiente en Primera División no fue más sencilla, con un nuevo descenso.
También fue complicado, porque a pesar del mal año estuvimos a punto de conseguir la permanencia a la heroica en el último tramo con Fernando Vázquez… pero perdimos contra la Real Sociedad en el último partido en casa. Fue un palo despedirme de esa forma.
¿Echas de menos A Coruña? ¿Te gustaría volver en un futuro?
Claro que sí, A Coruña es mi casa y mi hija nació allí. Es una ciudad en la que siempre me he sentido muy querido. Nunca se sabe qué puede pasar pero me gustaría volver algún día.
¿Cómo ves al Dépor desde la distancia y qué te ha parecido la reciente destitución de Víctor?
El equipo hizo una primera vuelta muy buena pero le faltó regularidad para mantener el nivel durante toda la temporada. Es una pena, porque parecía había equipo para más. Con respecto a Víctor, desconozco los temas extradeportivos que han llevado a esta situación. Son circunstancias que nunca gustan en el ámbito de un equipo pero estas decisiones se toman por el bien de todos. Estoy convencido de que no le faltarán ofertas para entrenar.
Otro equipo que te toca de cerca es el Getafe, que este año ha perdido la categoría.
Es un equipo al que le estoy agradecido por darme la oportunidad de jugar en Primera División y firmar después por el Deportivo. Los descensos son situaciones muy duras en el fútbol y, como jugador que las ha vivido, te pones en su piel y te fastidia. Tengo amigos tanto en el Getafe como en el Rayo y la verdad es que me duele mucho por ellos.
Para terminar, ¿te gustaría mandar un mensaje a la afición del Dépor?
Decirles que siempre llevaré al Deportivo y a su gente en el corazón. En los años que pasé en A Coruña lo he dado todo por el equipo y quiero darles las gracias porque su apoyo ha sido fundamental en cada momento. Ha sido un orgullo jugar en Riazor y todo lo que he vivido como jugador del Dépor.