Décimo aniversario de una de las victorias épicas en la historia herculina. Hace justamente diez años, el Deportivo asaltó el Olímpico de Munich con un hat-trick de Roy Makaay en una noche mágica. Aún hoy es el único equipo español que fue capaz de conquistarlo.
Era miércoles. Septiembre de 2002. El Deportivo había quedado encuadrado en el Grupo G de la Champions League con dos grandes del continente, Milán y Bayern de Munich. Junto a ellos el francés Lens del joven Seydou Keita era la cenicienta del grupo de la muerte. En el primer partido del conjunto dirigido por Javier Irureta tocaba visitar el feudo bávaro dirigido por el también alemán Ottmar Hitzfeld. Ningún equipo español, hasta el momento, había podido conquistar el Olímpico de Munich y el Dépor intentaría cambiar la historia.
Y lo hizo. Vaya si lo hizo. Un Deportivo compacto, combinativo, imaginativo y resolutivo hizo quedarse de piedra hasta al mismísimo Franz Beckenbauer, convidado de honor en el palco. El comienzo no pudo ser mejor, ya que en el minuto 12 los blanquiazules se ponían por delante. Apoteósico pase de cuchara a las espalda de los centrales de Juan Carlos Valerón y definición precisa de Roy Makaay por debajo de las piernas de la mole Oliver Kahn, uno de los porteros con más carácter que se recuerdan en las últimas décadas. La conexión canario-holandesa que ese mismo año convirtió al tulipán en Bota de Oro empezaba a surgir efecto en un estadio inexpugnable.
El Bayern, más con corazón que con calidad y fútbol, intentaba arrinconar a un Deportivo que se resistía a ser dominado por el gigante alemán. Sergio y Mauro eran el corazón en el centro del campo, Naybet la garra en la defensa, Donato el temple, Fran y Valerón ponían la magia y Makaay la determinación. Además, un nuevo protagonista -esta vez desde el costado derecho- cuajó el mejor partido que se le recuerda en el conjunto blanquiazul. Héctor Berenguer recibió en largo un pase del ‘Flaco’ para ponérsela en bandeja al holandés que no falló de cara a puerta: 0-2. Después del gol, pitido final de los primeros 45 minutos.
La bronca de Hitzfeld tuvo que ser de escándalo, ya que tras el descanso los bávaros salieron como leones. Aunque seguían sin encontrar un fútbol fluido, aprovechaban los balones largos y las jugadas de estrategia para meter el miedo en el cuerpo a los gallegos. A los once minutos de la reanudación, Salihamidzic se aprovechó de un barullo en el área para recortar diferencias. El conjunto deportivista se vino abajo al tiempo que los alemanes crecían sobre el terreno de juego y tardó Elber siete minutos para poner las tablas. El Dépor había sido mejor durante la hora de partido que se llevaba jugado pero ya se encontraba con empate en el marcador y una sensación de desesperación por un resultado que se antojaba injusto.
Pasados diez minutos del gol del brasileño y del arreón local, el Deportivo se volvió a adueñar de la pelota. De nuevo Valerón. De nuevo la magia, la seda, la clase. El canario recibió de espaldas en el centro del campo, controló con el pecho y a la media vuelta y sin que el balón cayese, filtró un pase inolvidable a Makaay que no desaprovechó. Hat-trick del holandés y partido redondo del de Arguineguín que dejó boquiabiertos al público del Olímpico. Un hombre fue capaz de hacer maravillas en el verde de Munich, y otro fue capaz de aprovecharlas.
Victoria histórica del conjunto gallego en tierras alemanas, que aún actualmente es la única conseguida por un equipo español. Hoy se cumplen diez años de aquel soñado triunfo. Felicidades a todos los deportivistas.
FICHA TÉCNICA:
Bayern de Munich: Oliver Kahn; Sagnol (Hargreaves, min.46), Kuffour, Linke, Michael Tarnat; Salihamidzic, Jeremies (Kovac, min.78), Ballack, Zé Roberto (Zickler, min.81); Pizarro y Elber.
Deportivo de La Coruña: Juanmi; Héctor, Naybet, Donato, Romero; Sergio, Mauro Silva; Víctor (‘Toro’ Acuña, min.71), Valerón, Fran (Capdevila, min.67); Makaay (Luque, min.86).
Goles: 0-1 Makaay, min.12; 0-2 Makaay, min.45; 1-2 Salihamidzic, min. 56; 2-2 Elber, min. 64; 2-3 Makaay, min. 77.
Árbitro: Graham Poll (colegiado inglés). Amonestó a Salihamidzic por parte del Bayern y a Víctor y a Luque por el bando deportivista.