Nueva entrega de la sección de Pepe Mansilla, dedicada a la parte del Deportivo que nunca falla.
Equipo hundido, más de tres meses sin ganar y con pocos motivos para creer en la salvación. Sin embargo, allí estaban. Sin nada con lo que ilusionarse, pero ilusionados. Primero vistieron las calles vizcaínas de blanquiazul; después, animaron a su equipo hasta llevarlo al empate en el último minuto; y por último, rieron y lloraron de emoción a partes iguales. Los 1000 de Bilbao, la enésima representación de la siempre fiel afición del Deportivo, que esta vez eligió San Mamés para dar otra lección.
La Viñeta Turka de Pepe Mansilla no podría tener otro protagonista que ellos. Si hay algo que puede invitar al Deportivo a creer, es su afición, que ha demostrado que, por muy dura que se la temporada en todos los frentes, nunca lo dejará solo.