Yeremay no quiere esperar más. Desde el momento en el que le diagnosticaron su fractura en el peroné, el canario se enfocó en trabajar para regresar lo antes posible. Así, cuando ni siquiera se ha cumplido unes desde aquel parte médico que auguraba un tiempo de baja de ocho semanas, el atacante blanquiazul ha comenzado ya a realizar sus primeras tareas con el grupo.
De momento sólo ha participado en los primeros ejercicios de calentamiento y circuitos de fuerza. Los servicios médicos no quieren correr riesgos con él, tanto por la lesión propia como también en lo que se refiere al aspecto muscular, ya que sería peligros pasar de cero a cien tras varias semanas limitado en el trabajo físico.
En todo caso, el regreso de Yeremay a los terrenos de juego está mucho más cerca de lo que se esperaría a estas alturas. Parece complicado que vaya a jugar este domingo ante el Celta Fortuna, pero si su evolución es buena durante los próximos días y tolera bien el regreso a los entrenamientos de mayor ritmo, es probable que la próxima semana reciba el alta médica y pueda viajar al Toralín.
Preocupación por Puerto, regresa Pablo Martínez
El susto de la mañana en Abegondo lo dio el fabrilista Puerto. El central es uno de los jóvenes que está a las órdenes de Idiakez esta semana y tuvo que retirarse antes de tiempo a los vestuarios sin poder caminar entre visibles gestos de dolor. Hay preocupación de que pueda tener una lesión importante en el pie izquierdo.
La parte positiva la protagonizó Pablo Martínez. El central francés parece totalmente recuperdo del fuerte golpe que sufrió ante el Fuenlabrada y este jueves se ha entrenado con normalidad. Salvo complicaciones en los próximos días, podrá seguir formando pareja junto a Pablo Vázquez en el eje de la zaga.
