No hay manera. Sea lo que sea y cuando sea, pero al Deportivo siempre le pasa algo que le impide lograr el triunfo. A veces son los propios jugadores los que provocan esas situaciones y otras, como en el Wanda, cuentan con la ayuda de terceros. Esta vez fue Trujillo Suárez, el árbitro del Atlético – Deportivo, que estuvo rápido con el silbato en la jugada que decidió el encuentro. Más allá de si el agarrón de Mosquera a Saúl fue suficiente para que hubiera penalti, la pregunta es si lo hubiera pitado en el otro área con los protagonistas cambiando su papel. Nunca lo sabremos, pero creo que todos coincidiríamos en la respuesta.
El encuentro tenía los condicionantes propicios para que el Dépor pudiera romper el gafe que lo acompaña cada vez que visita al Atlético. Con muchas bajas y poca motivación, pensando más en la Champions y en el derbi, los de Simeone salieron con la idea de dejar pasar el tiempo y sin demasiada intención de empujar al rival, al menos de inicio.
Los problemas físicos le sirvieron de coartada a Seedorf, que por primera vez salió con sólo dos delanteros y un centro del campo muy poblado. Guilherme, Muntari y Mosquera contuvieron bien el juego local, mientras que Çolak se encargaba de lanzar a Adrián y Lucas. Llegaron las primeras ocasiones, a la contra, un recurso que todos los técnicos blanquiazules se han empeñado en despreciar durante todo el año a pesar de la velocidad de sus puntas. El de Monelos tuvo la más clara tras un fallo de Savic, pero entre que ahora mismo ve la portería a la mitad y que Oblak se agranda siempre, su remate se estrelló en el meta.
El propio Lucas remató de nuevo minutos después un buen centro de Luisinho, pero su cabezazo salió muy centrado. Dominaba el Dépor y apenas llegaba el Atlético, hasta que pasó lo de siempre. Un error propio, combinado esta vez con la predisposición arbitral, puso al conjunto deportivista por detrás en el marcador. Balón colgado al área, forcejeo entre Saúl y Mosquera y ligero tirón de camiseta del coruñés que terminó en penalti. Gameiro no perdonó desde los once metros.
Le costó mucho más al Dépor en el inicio de la segunda parte. El Atlético le puso anestesia al encuentro y cambió los balones entre líneas a Correa por los pases horizontales entre sus centrocampistas. El plan coruñés no funcionaba y esperar atrás ya no servía.
Seedorf retiró a Muntari para colocar a Borja Valle en punta y abrir a Adrián a la banda. El asturiano, siempre más cómodo en la banda, empezó a llevar peligro en cada balón que tocaba. Simeone también tenía soluciones y tirando de atrevimiento metió un delantero más. Diego Costa entró al campo y en apenas un minuto ya tuvo la primera, que se le fue por poco desde la frontal.
Quedaban más de 20 minutos, pero el Dépor no supo meterle una marcha más al encuentro. Entre la falta de ideas y la descomposición del equipo con la salida de Çolak, el equipo apenas pudo trenzar alguna jugada que inquietara a Oblak.
FICHA TÉCNICA:
Atlético de Madrid: Oblak; Isaac (Diego Costa, min.63), Godín, Savic, Lucas; Saúl, Thomas (Moya, min.88), Gabi, Koke; Gameiro (Torres, min.72), Correa.
RC Deportivo: Rubén; Juanfran, Albentosa, Sidnei, Luisinho; Guilherme, Muntari (Valle, min.63), Mosquera, Çolak (Bakkali, min.77); Adrián (Andone, min.81), Lucas Pérez.
Goles: 1-0: Gameiro, de penalti. min.34
Árbitro: Trujillo Suárez. Mostró tarjeta amarilla a Luisinho y Lucas en el Dépor y a Isaac y Diego Costa en el Atlético.
Incidencias: Estadio Wanda Metropolitano. Partido de la jornada 30 de Primera División.