Nadie en el Deportivo está dispuesto a dejarse pisotear en el Caso Fuenlabrada. Ni el club como institución, ni tampoco ninguno de sus jugadores, como es el caso de Álex Bergantiños. En uno de los episodios más escandalosos de todo el proceso, el capitán blanquiazul fue detenido y acompañado a comisaría para declarar tras la filtración de un audio suyo a la plantilla. Ahora, y según adelanta El País, Bergantiños ha decidido denunciar a los dos agentes del Centro Nacional de Policía de Integridad en el Deportivo y Apuestas por detención ilegal.
La denuncia que terminó con el coruñés en Lonzas fue interpuesta por el Departamento de Integridad de la Liga, aunque también hubo demanda por parte del Fuenlabrada. Además de declarar, los agentes también le requisaron a Bergantiños su teléfono móvil y se lo llevaron a Madrid, según apunta El País. Después de recibir la negativa a enviárselo de vuelta porque no se podían malgastar recursos públicos en el envío, esta mañana ha sido un familiar del jugador el que ha recogido el terminal en la capital.
Malestar entre los sindicatos de policía por el caso Bergantiños
La actuación fue polémica y criticada, tanto desde el juzgado de instrucción 1 de A Coruña, como también por la Unión Federal de Policía, uno de los sindicatos mayoritarios. En un escrito incluso piden que se inicie una investigación sobre la actuación del excomisario Florentino Villabona, ahora al frente del departamento de integridad y seguridad de LaLiga. De hecho, el propio diario también señala que tanto la Unión Federal de Policía, como otro sindicato, están barajando la posibilidad de unirse a la denuncia de Álex Bergantiños y personarse en el caso.