El Deportivo se encuentra en plena pretemporada 2019-20. Con Juan Antonio Anquela como nuevo responsable desde el banquillo, los coruñeses van ya por la segunda semana de trabajo. Y si por algo se caracterizan estos primeros entrenamientos, como cabía esperar, es por la intensidad que le está imprimiendo el staff técnico con Anquela a la cabeza.
Este mismo lunes, el técnico jienense, que ya pudo contar con todos los fichajes, una vez que Gaku Shibasaki se unió al trabajo con el resto del grupo, dejó muestras de sus señas como técnico. En todo momento, desde la llegada del nuevo preparador, Paco Zas se encargó de explicar que, antes de su elección, le había pedido a Carmelo un perfil muy concreto. Y dijo de Anquela que es «un entrenador que transmite carácter y no tiene miedo de apostar por la cantera»
El propio Anquela no ha escondido sus cartas ante los medios. De hecho, fue muy franco cuando le preguntaron por su estilo. “Me encanta jugar al fútbol, pero yo tengo un problema gordo y es que no vendo historias. Lo que más me gusta es ganar y se puede llegar a eso por muchos caminos. El fútbol es como la vida, pone a cada uno en su sitio. Me gustan los equipos de fútbol, que sepan jugar, que sepan lo que hay que hacer con el balón. En unos sitios lo he conseguido, en otros, no. Mis equipos han tenido unas señas de identidad que a veces se han confundido. Se decían unas cosas y luego mirabas los números y decían lo contrario”.
Así las cosas, en la sesión vespertina del lunes en Abegondo, Anquela no paraba de repetir una y otra vez el grito de «Vamos». «Hay que salir, hay que salir como un cohete. Me * en la * madre que me parió», le recriminó a un zaguero en una jugada puntual. Además, constantemente incidía en la rapidez con balón.