‘Adelante’ presenta a la Real Sociedad de Philippe Montanier, uno de los conjuntos revelación de la temporada, que vive su mejor campaña en la última década. Solidez defensiva, aunque trastocada por las bajas; verticalidad ofensiva.
El Deportivo se enfrentará el domingo a una Real Sociedad que vive su mejor temporada en Primera División de los últimos diez años. Los vascos encaran el choque ante el equipo coruñés en una dinámica positiva, a pesar de su reciente derrota en el Bernabéu, y con sus cuatro hombres de ataque más ‘enchufados’ que nunca. Una victoria los dejaría a un paso de entrar en puestos europeos.
Contexto. Sorpresa. Dispuestos a soñar con Europa.
En ocasiones, para llegar a la cima lo mejor es pasar desapercibido. Es preferible que otros -como Rayo Vallecano, Levante o Betis- acaparen titulares que permitan al resto olvidarse de la presión, tal y como le sucede a la Real Sociedad. Más protagonista que nunca en su última derrota con el Real Madrid debido a un debate que ni les va ni les viene, los Txuri-urdin no han recibido la atención mediática merecida. ¡Y menuda temporada están haciendo! Si bien es cierto que cuentan con una buena plantilla, el club vasco se ha limitado a mantener la base que el curso pasado le permitió eludir el descenso con bastantes dificultades -lo logró a dos fechas de la conclusión del campeonato-. Sin embargo, esta campaña ha dado un salto cualitativo gracias, en mayor medida, a los siempre desequilibrantes Xabi Prieto, Griezmann o Carlos Vela -a los que se esperaba-, pero sobre todo a la explosión definitiva de hombres como Ifrán, Illarramendi o Alberto De la Bella.
Philippe Montanier, siempre cuestionado por la grada de Anoeta, no ha dotado a su plantilla del fútbol más brillante de la categoría pero, a punto de ser cesado en noviembre, supo reaccionar en la jornada 11, cuando venció al Málaga en La Rosaleda, un triunfo con el que inició una racha de siete encuentros sin perder -cuatro victorias y tres empates- hasta su derrota la pasada jornada en el Santiago Bernabéu. El técnico galo dio a su equipo la solidez necesaria para aprovechar sus grandes individualidades en ataque, lo que le sirvió para despegar hasta la mitad superior de la tabla. Ahora, la Real es novena, con 25 puntos, a cinco de Europa y ya a diez del descenso. La asignatura pendiente de Montanier es, sin duda, el ganar lejos de su estadio, ya que, desde su llegada al banquillo blanquiazul, lejos de San Sebastián hace una temporada y media solo ha conseguido la victoria en cinco ocasiones. Pero este domingo, en casa y ante su público, será otra historia.
Nombres propios. Calidad vasca y no tan vasca. Ha sabido mezclar futbolistas de la casa con los fichajes adecuados.
– El ‘crack’: Xabi Prieto. Capitán. Aunque su principal cualidad es el regate, el mediapunta guipuzcoano destaca también por su llegada y por su buen disparo lejano. Su calidad técnica y su regularidad lo han convertido en un fijo en el once inicial durante los últimos años. En el último partido logró un hat-trick ante el Real Madrid. Junto a Griezmann, un peligro imprevisible.
– El ‘muro’: De la Bella. Una de las sensaciones del campeonato en cuanto a laterales zurdos se refiere. Luchador, constante y rápido, ha participado en las 18 jornadas que se han disputado hasta el momento. Ante las bajas de Estrada, Mikel González e Íñigo Martínez, el catalán será el único defensa titular disponible ante el Deportivo.
– El ‘cerebro’: Rubén Pardo. Revelación. Forma parte de la gran hornada de centrocampistas jóvenes y creativos que han empezado a destacar en Primera División, como Víctor Pérez, Koke o Álex López. Organizador con una gran visión de juego y con una calma impropia para su edad. A sus 20 años, muchos lo ven como el sustituto del eterno Aranburu. En Riazor.org hemos querido rendirle homenaje con el siguiente artículo.
– El ‘killer’: Carlos Vela. Delantero de excelentes condiciones técnicas y físicas que nunca tuvo la oportunidad -más que merecida- de triunfar en el Arsenal, aunque todavía tiene 23 años. Rápido, escurridizo y determinante. Esta temporada ya ha anotado siete tantos. Puede jugar como referencia, por detrás del ‘punta’ o en banda.
El dato. La muralla de Anoeta. Es el conjunto menos goleado como local.
Si hay que achacar a Montanier el no haber sabido ser competitivo lejos de su estadio, también hay que reconocerle que desde que aterrizó en San Sebastián, y en mayor medida esta temporada, ha sabido hacer un fortín del recinto txuri-urdin. El curso pasado Anoeta ya fue un activo importante a la hora de lograr la salvación, pero en la campaña 2012/2013 se ha vuelto casi infranqueable. De nueve encuentros disputados en su casa, la Real Sociedad tan solo ha perdido dos, ha empatado otros dos y ha ganado cinco, pero lo que más destaca es que tan solo ha encajado cinco tantos como local, el que menos de toda la Liga BBVA. Además, ha marcado 13.
Un momento histórico. 1980 – 1982. Doble título de Liga.
Tan solo nueve equipos españoles pueden presumir de tener un Campeonato Nacional de Liga en su palmarés. Seis de ellos tienen más de uno. Uno de esos es la Real Sociedad que se proclamó campeón por dos veces consecutivas: en la temporada 1980-1981 y en la temporada 1981-1982. Alberto Ormaetxea fue ese técnico que llevó al conjunto vasco a las cotas más altas de toda su historia, y Arconada, López Ufarte, Alonso, Satrústegui y Kortabarrias fueron algunos de los héroes desde el césped. Ya la campaña anterior, la Real Sociedad se había quedado a las puertas de ser campeón, habiéndole arrebatado el Real Madrid el liderato en la penúltima jornada. Y todo apuntaba a que, en 1981, el desenlance sería similar, cuando un parcial 2-1 en El Molinón daba el título a los blancos. Pero en el 90, sobre la bocina, Jesús María Zamora anotó el tanto más importante de la historia donostiarra. El año siguiente, disputando la Copa de Europa -aunque se eliminó en dieciseisavos de final ante el CSKA de Sofía-, la Real Sociedad repitió la hazaña.
Una leyenda. Darko Kovacevic. El tiburón serbio.
Aunque su dimensión global quizá no llegue a la de otros clásicos de la Real Sociedad como Arconada, Darko Kovacevic es, sin lugar a ningún tipo de dudas, uno de los hombres clave en la historia reciente de la Real Sociedad. Su primera campaña en San Sebastián, la temporada 1996-1997, se hizo un hueco en la delantera txuri urdin, aunque no sería hasta la segunda cuando comenzó a despuntar. Con 17 goles, se consolidó como uno de los grandes goleadores de la Liga. Fue clave en el tercer puesto logrado por su equipo. Repitió rendimiento en la campaña siguiente, lo cuál le llevó a firmar por la Juventus por casi 3 500 millones de las antiguas. Tras tres años en Italia, en los que no triunfó, volvió a la Real Sociedad, donde volvió a ofrecer su mejor nivel. Destaca la temporada 2002-2003, en la que formó una delantera histórica con Nihat Kahveci, anotando casi 40 goles entre ambos, que llevaron al equipo hasta el subcampeonato de Liga. De esta forma, es, con 107, el tercer máximo goleador de la historia txuri urdin.
Un lazo blanquiazul. Victorias locales. Muy pocos ‘doses’.
Los partidos entre Real Sociedad y Deportivo han destacado históricamente por las victorias locales y, consecuentemente, las derrotas visitantes. Es especialmente llamativo el caso de la década de los 50, donde ambos equipos se enfrentaron 16 veces, con 14 victorias locales y 2 empates. Incluso se intercambiaron varias goleadas, como el 7-1 en 1951 en el que la tripleta Igoa – Alsúa – Pérez destrozaron al Dépor de Juan Acuña, o el 5-0 de 1956, en el que un fenomenal Arsenio Iglesias se deshizo de los txuri urdin con dos goles y dos asistencias. En los últimos 17 encuentros, solo se encuentran en la estadística tres victorias visitantes.
