Luis Pastur, antiguo técnico de la cantera del Deportivo, disfruta ahora de una nueva experiencia en el fútbol gracias a Independiente del Valle, club del fútbol ecuatoriano. Es entrenador de las inferiores de un club que fue sorpresa en 2016 por llegar a la final de la Copa Libertadores y que ahora se ha asentado en la élite del fútbol sudamericano.
«La oportunidad me surgió a través de un antiguo compañero del Dépor. Él se había venido ya en 2019 y me comentó la posibilidad de poder venir. El club estaba interesado en traer entrenadores españoles para formar tanto a jugadores como al técnico local. Me comenta como es el proyecto, la estructura del club y lo vi como una oportunidad de mejorar y seguir creciendo. Era un salto para intentar vivir del fútbol», comenta Pastur sobre su llegada a Independiente.
Él mismo cuenta que su experiencia hasta el momento está «marcada por el COVID». «Llego en enero del año pasado, hacemos ocho semanas de pretemporada y confinados. En agosto volvimos a entrenar pero sin competición oficial. Muy marcado por el COVID pero a la vez una experiencia rica, de poder entrenar a unos jugadores con un contexto sociocultural distinto. Fue un poco adaptarse y aprender«.
Luis Pastur: «Nunca me imaginé ver al Dépor en Segunda B»
«En los últimos años en el Dépor parece que todo lo que puede salir mal saldrá mal. La moneda siempre salía cruz. Seguro que hay cosas que a la larga la gente que dirige el club tendrá que analizar. La inestabilidad está en todos lados, así no es fácil salir de una espiral negativa. Como aficionado es duro, pero no queda más que apretar y con trabajo llegar a donde el club y la afición se merece«, dijo sobre el descenso del club a Segunda División B.
Sobre el Caso Fuenlabrada asegura que tiene la misma opinión que el «99% de los coruñeses«. «No se debería haber jugado el resto de la jornada, si haces unos horarios unificados es por algo. Evidentemente tú estas condicionado si tu rival juega a la vez. Podía haber salido bien y salvarse, pero aun así no habría sido justo«.
También entró a valorar la llegada de Rubén de la Barrera: «Ojalá le salga todo genial a Rubén, que sea capaz de exprimir a la plantilla, que seamos capaces de ver a un equipo como el de la Cultural, donde pueda sacar rédito a la plantilla y jugar buen fútbol. Siendo él coruñes va a hacer todo lo que pueda«.
«Secho para mi es un referente. Es un estudioso del fútbol. Puede ponerte un vídeo y cada segundo que se mueve el balón o un jugador hace algo te dice todo lo que está cambiando en el juego. Yo en Laracha tuve jugadores que habían pasado por su mano y ves esos jugadores interpretan el espacio muy bien. Ese jugador, años después de estar con él, ves como ha incorporado algo a su ser. Además es gallego y ama al Dépor. Seguro que por trabajo y conocimiento no va a ser. Va a dedicar todas las horas que han falta para que esto funcione», sobre el nuevo segundo entrenador del Deportivo.
Pastur: «En cada generación veías algún jugador que podía llegar»
«Yo soy de A Coruña, del Dépor. Siempre quise jugar en el Deportivo pero nunca fui los suficiente bueno para ello. Tuve la oportunidad de entrenar en la cantera y allí aprendí a ser entrenador. Ves que hay jugadores con talento y que tienes que ayudarlos a ser competitivos y resolver situaciones exigentes. Los jugadores que tuve eran espectaculares y aprendí mucho de ellos. Para mi fue un orgullo y una felicidad» comentó en referencia su pasado en la cantera.
También tuvo tiempo para valorar el salto de la cantera al primer equipo: «Es cierto que históricamente los jugadores de la cantera del Dépor no llegan al primer equipo. El equipo casi nunca se nutría del Fabril. A mi me gustaría que esto se hiciese. Cada vez van entrando más y ojalá tengan esas oportunidades y las aprovechen. Para mi jugadores siempre hubo para llegar al primer equipo o al fútbol profesional, en todas las categorías veías a alguno. Tienes a Sergio Bernárdez en el Atlético de Madrid, a Álvaro Carreras en el United, Novoa en el Leizpig. El jugador talentoso está».
Pastur: «El jugador ecuatoriano tiene una gran proyección»
«El jugador ecuatoriano tiene un futuro y una gran proyección. Ya solo por el biotipo, tienen mucho jugador de raza negra. Tú ves ahora mismo la Selección de Ecuador, que es una selección joven y que lo está haciendo muy bien en las clasificatoria y ese es el prototipo de jugador. Un estilo Pervis Estupiñan, veloces, fuerte, ganador de duelos, técnicamente muy bueno y talentoso. Es un perfil de jugador para la élite«, sobre el jugador ecuatoriano.
Pastur explicó las diferencias entre las canteras europeas y cómo es el trabajo en Independiente del Valle: «Esto es algo que no existe en España, los jugadores viven en el complejo. Todos entrenan por la mañana y van a clase por la tarde. Tenemos un colegio dentro del complejo. Tú como entrenador vas a allí por la mañana y es todo profesional, desde el Sub12, todos entrenan como un profesional. Los jugadores entrenan cuatro o cinco días a la semana».
«A través del entrenamiento les ayudamos a crecer, que sean autónomos e independientes. Intentamos sacar jugadores para nutrir a la selección ecuatoriana y a partir de ahí poner al club en un alto nivel nacional e internacional. Si juntas una buena generación al final la suerte te tiene que sonreír, puedes llegar y puedes competir a los más altos niveles. La idea es trabajar con nuestras armas para cada vez estar más cerca de los grandes equipos del continente«.