El costarricense afirmó que es «fantástico» que Riazor se vaya a llenar y aseguró que «no será fácil» superar la línea de cinco defensas del Levante.
Pese a que la Audiencia Nacional no decidirá hasta mañana si la huelga es legal o ilegal, el Deportivo se prepara pensando en que este domingo (19:00 horas) se enfrentará al Levante. Así lo ha asegurado Celso Borges esta mañana desde la sala de prensa de El Mundo del Fútbol de Abegondo. «Nos estamos preparando para que se juegue. Si al final no acontece, eso es algo que no controlamos nosotros, pero no entrenamos por entrenar. La huelga no nos distrae«, declaró, antes de aseverar que está seguro de que «se tomará la mejor decisión para beneficiar al fútbol y a los futbolistas». «Hasta ahora no ha habido conciliación, pero para eso está el sindicato, para luchar por los jugadores», añadió.
Ya pensando en el partido, comunicó que han llegado a «este punto de la temporada en el que no nos vale nada más que una victoria» pero también que «no es fácil» superar la línea de cinco defensas del equipo de Lucas Alcaraz y que están «analizando» esa situación para saber cómo «contrarrestarla».
Por otro lado, celebró que Riazor haya colgado ya el cartel de lleno: «es fantástico. Desde que llegué he podido apreciar todo el cariño y amor que le tienen al club. Es formidable. Se me acaban los adjetivos con el apoyo«.
En cuanto a la posible presión que puedan sentir ante un choque de tanta trascendencia, dijo que a él esos nervios le «ayudan» a estar «concentrado». «A mí me sirve porque me indica que estoy viviendo el partido, que estoy viviendo la situación y estoy más atento y más concentrado. Eso quiere decir que tenemos pasión por lo que hacemos», comentó, antes de reconocer que «es uno de los partidos más importantes de mi carrera». «En el Mundial había mucho por ganar y poco por perder. Aquí nos estamos jugando la vida. Hay que dejar el alma, el corazón y todos los órganos ahí adentro«, finalizó.