Último partido del año 2016 y primera gran final para el Deportivo. También, quizá incluso más, para el rival que tendrá enfrente, un Osasuna que se presenta en A Coruña como colista y que no parece reaccionar pese a la llegada de Joaquín Caparrós a su banquillo hace mes y medio. Los rojillos no pueden pasar más jornadas sin sumar si no quieren que se les haga demasiado tarde y por eso se han conjurado para buscar el triunfo en Riazor. Para conocer con más detalle el difícil momento del conjunto navarro nos ponemos en contacto con Alberto Sanz, que sigue la actualidad de Osasuna desde los micrófonos de COPE Navarra.
Con sólo 7 puntos llega Osasuna al último partido de Liga de 2016. Si en A Coruña hablamos de final, imagino que en Pamplona hace tiempo que todos los partidos lo son…
Es una final por ser frente a un rival directo, es una final porque el equipo necesita ganar, es una final porque en el mercado no es lo mismo estar en la pelea que descolgado y es una final porque Caparrós está en cifras de récord (negativo) en caso de perder.
A Osasuna le está costando en este regreso a Primera, pero las lesiones tampoco están ayudando. Han sufrido muchas y varias de alta gravedad.
Tres jugadores en principio titulares se van a perder prácticamente toda la temporada, además Digard era el hombre señalado para mantener el centro del campo. El presupuesto más bajo de primera con creces, sumado a las lesiones, hacen que la situación sea muy complicada.
¿Ha supuesto algún cambio tangible la llegada de Joaquín Caparrós al banquillo?
Hay un cambio táctico de cinco defensas a cuatro. Los primeros partidos hubo muchos cambios de jugadores para probar y conocer, ahora parece que el equipo va cogiendo forma, el problema es que las cuentas de jornadas y puntos no salen. La clave es empezar a sumar.
El utrerano llegó como revulsivo, pero acumula cuatro derrotas en cuatro partidos. ¿Cuál está siendo su discurso de cara a la plantilla y la afición rojilla?
El discurso de un equipo intenso y con apuesta por la cantera. El problema es que tras cinco partidos oficiales solo conocemos la derrota, la esperanza es variar el rumbo en Riazor y coger confianza para seguir trabajando.
Desde la distancia, parece que una de las pocas noticias positivas en Pamplona es el buen nivel que varios jugadores jóvenes están apuntando en la máxima categoría.
Los once fichajes, salvo dos excepciones, no están rindiendo al nivel esperado. Afortunadamente los de casa están dando la cara, pero con eso no le está bastando al equipo rojillo para sumar puntos.
¿Le quedan balas en la recámara a Osasuna? ¿Habrá fichajes en enero?
La directiva ha dicho que si hiciera falta hacer un esfuerzo lo harían, Mikel Merino podría estar cerca de regresar. Pero todo pasa por ganar al Deportivo y que el esfuerzo sea con esperanza y no estando excesivamente descolgados.
¿En qué situación institucional está ahora mismo el club, después de todo lo sucedido con la directiva encabezada por Patxi Izco?
Ahora mismo está todo en stand by, a la espera de los juicios y con cierta tranquilidad. Preocupa más el asunto con Hacienda y la posible multa.
En Coruña hubo cierta controversia al anunciarse la cesión de Oriol Riera a un equipo que se considera rival directo. ¿Qué sensaciones está dejando el punta en esta nueva etapa en Osasuna?
Está siendo un fijo en los onces de Osasuna, ha marcado goles y está ayudando mucho a Sergio León. Se esperaba un poco más de él, pero está cumpliendo con creces y debería ir a más su rendimiento.
¿Cómo se ve al Dépor de Garitano desde Pamplona?
Un equipo que por plantilla debería estar más arriba, sus dos últimos partidos han sido muy buenos, pero antes ha tenido días malos. Un equipo irregular que tiene jugadores de mucho talento.
¿Crees que el Deportivo será rival directo de Osasuna hasta el final o que acabará emergiendo y salvándose un poco antes de la jornada 38?
El Deportivo está combinando hasta ahora grandes partidos con partidos un poco justos, si logra una regularidad está claro que por plantilla puede salir. Para los intereses de Osasuna más vale que no encuentre esa regularidad.
EL TEST DEL RIVAL
Jugador más peligroso: Sergio León
Jugador de más calidad: Roberto Torres
Eje del juego: Roberto Torres
Mejor defensor: El bloque cuando están bien
Defensa más débil: El bloque cuando no salen las cosas
Decepción de la temporada: Fran Mérida
Sorpresa positiva: Sergio León
Mejor revulsivo: Alex Berenguer
XI probable: Nauzet; Tano, Iván Márquez, David García, Clerc; Roberto Torres, Causic; De las Cuevas, Romero, Berenguer; Sergio León.