En Riazor.org siempre nos ha interesado saber cómo les va a todos aquellos aficionados que se ven obligados a seguir el día a día del Deportivo. Algunos de ellos, ilustres que llegaron a vestir la blanquiazul en algún momento de sus carreras. Este es el caso de Dani Cancela, coruñés que lleva una década en el Hong Kong enrolado en las filas del Kitchee. Su rutina también se ha visto afectada por la pandemia y os traemos un serial titulado ‘Desde la (semi) burbuja’ en el que nos irá contando cómo lleva el día a día en su vida personal, al tiempo que trata de seguir lo mejor posible la actualidad deportivista:
Un título siempre es importante
Por casualidades del destino, los equipos en los jugué en España están hoy en día curiosa y desgraciadamente interconectados. Deportivo, CD Lugo y Fuenlabrada. Casi nada. Para mí, hasta este verano, solo tenían un punto en común: que nunca gané nada con ellos. Con el Fuenlabrada descendimos a Tercera, con el Lugo nos quedamos los dos años a las puertas de jugar la fase de ascenso a Segunda A y con el Fabril, a pesar de haber sido el campeón de Tercera con mas puntos, siempre fracasamos en el objetivo real, que era subir.
Por eso ahora me siento un privilegiado. Desde que llegué a Hong Kong he tenido la suerte de ganar ligas y copas con un equipo, el Kitchee, que hasta entonces no estaba entre los grandes del país.
Este fin de semana repetimos. En la temporada mas rara de nuestras vidas, nos metimos en la final de la Sapling Cup y el domingo la ganamos. De los títulos en juego cada año, este es el menor. Es una competición en la que tienen que jugar al menos tres sub 23 en todo momento, y en la que se le suelen dar minutos a los mas jóvenes, pero a la hora de la verdad todos quieren ganarla. Porque un título siempre es importante.
Es un honor (y a la vez jode un poco, para qué mentir) estar en el campo rodeado de gente que nació en el siglo XXI. Niños y no tan niños a los que les doblo en edad. Pero después de diez años en el club es un orgullo ver que chicos a los que llevabas de la mano al salir al campo hace un tiempo, ahora crecen, maduran y se hacen futbolistas. Algunos hasta te solucionan los partidos. Es ley de vida.
Ganamos, y ganamos bien, pero ya pasó. En esta locura de liga que estamos jugando, el jueves tenemos otra final. Jugamos contra el líder y si ganamos nos pondremos primeros con solo dos partidos mas por jugar. Si al final conseguimos llevarnos la liga (nadie aquí daba un duro por nosotros esta temporada) toda esta locura del confinamiento, las burbujas, los test casi diarios y el sacrificio que nuestras familias están haciendo con nosotros y por nosotros, habrá valido un poco mas la pena.
Sé, por experiencia, que ganar nunca es fácil, incluso si el nivel de la competición no es muy alto o sobre el papel eres muy superior. Muchas veces ese papel es contraproducente y hasta peligroso. En la temporada que el otro día echó a andar en Vilalba, el Dépor va a encontrarse en ese papel muchas veces y es algo que vamos a ver como se gestiona.
Van llegando caras nuevas, se van renovando piezas fundamentales y el equipo va tomando forma. No pude ver el partido del otro día, pero tengo buenos amigos en Vilalba y me hablaron muy bien de Lara y de Borja Granero, y yo personalmente tengo mucha confianza en Miku. Sé que la gente piensa que estuvo estos años en ligas menores, pero nos sorprenderíamos el nivel de muchos de los extranjeros que tienen esas ligas y en ellas ha tenido siempre papeles estelares. Y no nos podemos olvidar de que viene a Segunda B para ser uno de los mejores jugadores de la categoría. Borges tiene que ser por juego y por galones el referente del equipo, y si se quedan todos los que están ahora mismo el equipo es un lujo para la Segunda B. ¿Suficiente para ascender? Sobre el papel sí, desde luego, Pero hay que demostrarlo cuando la pelota empiece a rodar, porque ganar nunca es fácil.