El Deportivo recibe un golpe duro para rumiar durante el parón después de caer goleado por el Mirandés (0-4) en un tramo de cuatro días que define a la perfección la primera vuelta blanquiazul: capaz de arrollar rivales y de hacer el ridículo contra cualquier equipo que no se pegue un tiro en el pie. Si a los de Gilsanz se le había pasado por la cabeza sacar pecho tras la victoria ante el Castellón, el último encuentro del año se lo hunde hasta el fondo.
- Sin descanso. Apenas movió el equipo Gilsanz a pesar de la cercanía con el partido ante el Castellón. Volvió Lucas y el sacrificado fue Villares para volver a emparejar a Mario Soriano con Mfulu en el doble pivote. Obrador fue el único cambio en una defensa que el jueves había pedido el cambio al completo, pero que repitió.
- Regalos adelantados. El Dépor salió bien al encuentro, encontrando espacios a la espalda de la atrevida presión del Mirandés, que salió valiente para buscar al cuadro local lejos de su portería. El problema fue la falta de inspiración de los de arriba, que ni por asomo fue la del jueves. La intención de jugar rápido llevó a continuas imprecisiones en último tercio que dejaban en nada ataques prometedores. Mientras, el desastre en área propia le regaló al rival el escenario soñado casi sin buscarlo. Un saque de banda que se tragaron Ximo y Pablo Vázquez terminó en penalti por manos de Mario Soriano. Menos de cinco minutos después, el propio Vázquez despejó mal un balón que no iba a ningún lado y hasta tres jugadores del Mirandés tocaron el balón en el área para que Roca hiciera el segundo.
- La resaca. Parecía que no podía ir a peor lo que se había visto en la primera parte, pero el Dépor ha demostrado en más de una ocasión que cuando se lo propone, siempre puede caer más bajo. La salida de los vestuarios para la reanudación fue esperpéntica y al primer cuarto de hora el Mirandés dejó el partido sentenciado en dos goles que reflejaron la bajada de brazos. Ambos de Izeta, el primero corriendo después de que a nadie vestido de blanquiazul decidiera hacer una falta, el segundo adelantándose en el área a un Pablo Vázquez irreconocible. La lista de calamidades se completó gracias a la colaboración de Fuentes Molina y López Toca, que apostaron por la roja tras una dura entrada de Villares cuyo castigo probablemente podía haberse saldado con otro color.
FICHA TÉCNICA DEL DEPORTIVO – MIRANDÉS
Deportivo: Helton; Ximo, Pablo Vázquez, Pablo Martínez, Obrador; Mfulu (Villares, 57′), Soriano (José Ángel, 70′); Mella, Lucas (Gauto, 84′), Yeremay (Gauto, 84′); Barbero (Bouldini, 57′).
Mirandés: Raúl; Rincón, Juan G. (Tomeo, 60′), Tachi, Parada, Alonso; Reina (Ander, 80′), Gorrotxa, Lachuer (Dadie, 77′); Izeta (Calvo, 80′), Roca (Homenchenko, 80′).
Goles: 0-1, min.36: Izeta, de penalti. 0-2, min.40: Roca. 0-3, min.55: Izeta. 0-4, min.63: Izeta.
Árbitro: Fuentes Molina (Valencia) – VAR: López Toca (Cantabria). Expulsó a VIllares por roja directa (77′) y amonestó a Barbero (53′) en el Deportivo y a Rincón (45′), Juan Gutiérrez (54′) y Calvo (90′) en el Mirandés.
Incidencias: Estadio de Riazor, 23.946 espectadores. Partido correspondiente a jornada 21 de LaLiga Hypermotion 24-25.