La Copa del Rey 2021/2022 se pone en marcha. Una nueva ilusión comienza para los equipos modestos. Y para el Depor. No solo la de poder enfrentarse a un equipo de la máxima categoría, sino la de poder llegar a eliminarle. Y el cambio de formato en el torneo a partido único hasta las semifinales provoca que esto pueda ocurrir con más frecuencia. Hay que recordar que este será el último año en el que la Segunda División B y Tercera División aparezcan en escena, ya que la reestructuración llevada a cabo por la Federación ha cambiado por completo el panorama. Pero la clasificación para esta edición todavía pertenece a la campaña pasada y por eso seguiremos utilizando estos términos ya acuñados como antiguos.
El torneo del KO español celebra el próximo miércoles 17 de noviembre su eliminatoria previa, donde por primera vez en la historia participarán veinte equipos de las categorías territoriales. Uno de ellos de A Coruña precisamente, un Victoria CF que si consigue superar al CD Hernani se enfrentará automáticamente a un combinado de la Primera División. Lo haría el próximo 1 de diciembre cuando se disputara la primera eliminatoria y como fruto de un sorteo programado para el viernes 19 de noviembre en Las Rozas. Allí también estará el Deportivo y se postula además como uno de los equipos clave de su categoría.
Real Madrid, Barcelona, Atlético o Sevilla serán los grandes candidatos, como en los últimos años. Pero el Deportivo es en las apuestas el que mejor papel puede desempeñar entre los equipos que no pertenecen a LaLiga, es decir, a Primera y Segunda División. Antonio Caro, redactor del portal de apuestas deportivas Casasdeapuestas.bet, comenta para este medio que “el Depor tiene esa categoría de club histórico que sabe lo que es ganar una Copa del Rey, lo que le puede hacer despuntar entre los equipos de Primera RFEF. También porque lleva una gran temporada hasta la fecha, sin conocer la derrota en casa”.
Pero ante un equipo que puede tener sus límites todo pasará por el rival al que se enfrente. Queda descartada la posibilidad de vérselas con un equipo de las categorías de oro o de plata del fútbol español. Los equipos que quedaron clasificados vía Segunda División B el curso pasado solo pueden verse las caras con plantillas de la misma categoría o de la categoría inmediatamente inferior, es decir, de Tercera División. Eso también implica que las posibilidades de jugar en Riazor disminuyen y eso no es una buena noticia. El Depor no conoce todavía la derrota en condición de local.
El líder del Grupo I de Primera RFEF es el segundo equipo con más puntos de la categoría de bronce solo por detrás del Villarreal B, es el equipo menos goleado y uno de los que está en mejor forma en el último mes. Y es por eso que espera llegar lejos, siempre sin descuidar sus obligaciones ligueras. En segunda ronda ha caído en los últimos tres años, algo insuficiente para un equipo que se adjudicó dos veces este trofeo en 1995 y 2002. Como equipo perteneciente a la tercera categoría española solo disputó la Copa en dos ocasiones: una en 1975 en la que se despidió en tercera ronda ante el Orense y otra en 1981 donde le apeó en la primera fase el Celta.
Una copa con mejores apoyos
Los equipos de la región han sido sus peores piedras en el camino y en este sentido en esta campaña tan solo estarán Racing de Ferrol como representante de la antigua Segunda B y Arenteiro y Bergantiños de Tercera. Los últimos en clasificarse fueron Ebro, Guijuelo, Leioa y Córdoba, gracias a su pase a las semifinales de la Copa RFEF que les daba derecho a entrar en la Copa. El Racing, por ejemplo, fue uno de los que se quedó fuera siendo uno de los favoritos a clasificarse. Algo que demuestra que nadie puede bajar la guardia y menos en un campeonato de tales magnitudes.
Para los equipos de categorías inferiores son fundamentales las ayudas que la Federación ha destinado a esta edición copera. En total 2,1 millones de euros solo entre los combinados de Primera RFEF, que se repartirán en 1,1 millones ya solo por la participación y otro millón entre aquellos equipos que superen una o varias rondas. Una vez que termine la participación de todos los de la categoría se llevará a cabo el reparto. Un reparto que puede ser clave a la hora de obtener refuerzos y una inyección de cara a un futuro ascenso de división.
El equipo de Borja Jiménez mira con optimismo lo que tiene por delante y espera a que las bolas repartan suerte entre los 112 equipos que van a estar en ese sorteo de la primera eliminatoria. Una ronda en la que el reparto televisivo también será clave para saber la fecha exacta del enfrentamiento. Mientras tanto, los blanquiazules siguen centrados en mantener el liderato liguero y coger una pequeña ventaja que le de la oportunidad de poder centrarse en el torneo eliminatorio cuando llegue el mes de diciembre.