Tras igualarla ante el Lugo, el Deportivo acaba de establecer con la derrota ante el Zaragoza la racha de partidos sin ganar más larga de su historia. Un total de 18 jornadas seguidas sin sumar una victoria. Para recordar una estadística similar hay que retroceder a la temporada 1987/88.
Mirando a aquel equipo de hace 31 años, el deportivismo puede encontrar uno de los últimos hilos a los que agarrarse para mantener una esperanza que ya escasea. Y es que, a pesar de encadenar 9 empates y 8 derrotas, el que hasta ahora era el Dépor de la peor racha histórica logró la permanencia en la última jornada.
Entre el Deportivo de esta temporada y el de aquel año hay diferencias importantes. Por un lado, en ese momento, la estadística negativa empezó cuando ya se habían conseguido 4 victorias y se prolongó de la jornada 11 a la 27, hasta mediados de abril. Además, la Segunda División estaba formada por sólo 20 equipos, con lo que duraba 38 jornadas y no las 42 actuales. Además, se sumaban 2 puntos por triunfo y 1 por empate. Esto se traduce en que la salvación le costó al Dépor únicamente 31 puntos, una cifra habitual entonces, mientras el ascenso requería unos 45 o 50.
Sin embargo, también existen similitudes más allá de la cifra de partidos sin ganar. Por el banquillo blanquiazul pasó, como ahora, más de un entrenador. Ni Eusebio Ríos, ni Luis Rodríguez Vaz consiguieron llegar al final de temporada, con 7 y 17 encuentros disputados, respectivamente. El tercero fue Arsenio Iglesias, que había dirigido a la SD Compostela. El de Arteixo cogió al equipo en la jornada 25 y sumó cuatro victorias más para certificar la permanencia en el último partido.
Aquella salvación agónica se consiguió finalmente gracias a un gol de Vicente Celeiro contra el Rácing de Santander en el minuto 92. El Dépor no dependía de sí mismo, pero Hércules y Bilbao Athletic, que estaban por encima, perdieron. Ahora, el conjunto coruñés establece un nuevo récord en su historia, pero en esta ocasión negativo.