Ocho miembros de la ‘Peña Deportivista Conxuro Branquiazul’ recorrieron cerca de 14 kilómetros, entre O Temple y Abegondo, para demostrar su apoyo al equipo.
El sentimiento que tienen los deportivistas es difícil de explicar. En un momento de crisis como el actual es cuando los aficionados blanquiazules demuestran su grandeza, apoyando y animando al equipo de sus amores con multitud de iniciativas. La última fue la promovida por los integrantes de la ‘Peña Deportivista Conxuro Branquiazul’, que demostrando la fe que sienten por el Deportivo organizaron una pequeña peregrinación desde la sede de la Peña, la Cervecería 7+7 de O Temple hasta El Mundo del Fútbol de Abegondo. Una procesión de 13.7 kilómetros.
El grupo todavía estaba reponiendo fuerzas en su sede pasadas las tres de la tarde. En su cara no se les nota el cansancio que acumulan tras la larga caminata. Al contrario, todos y cada uno de ellos irradian en su cara un amor por el Deportivo digno de admirar. Solo por eso se entiende que se dejaran “engañar” por una de las socias que, medio en broma medio en serio, propuso hace tiempo hacer la peregrinación para asistir a un entrenamiento. Todos los socios acogieron muy bien la iniciativa y todo se gestó muy rápido, aunque por la fecha en la que se realizó solo pudo acudir una pequeña representación de la Peña. “Faltó mucha gente hoy. Íbamos a ser 28”, apuntó una de las integrantes.
Partieron de la Cervecería 7+7 sobre las 8:30 de la mañana y llegaron a Abegondo pasadas las 12. Algo más de dos horas de un trayecto que realizaron “sin ningún problema”, a pesar de la dificultad que conllevan las varias cuestas que tiene el camino. Un tiempo que llevaron mejor gracias a que la climatología les “acompañó” y a que compartieron anécdotas e historias del Deportivo. También reconocieron entre risas que bajo la dirección de Verónica, su presidenta, cantaron “canciones de los Blues, de Isabel Pantoja y de Bertín Osborne”. Cuentan también que se encontraron con una reacción positiva de la gente con la que se cruzaron, algo que no esperaban. “Cuando íbamos por la carretera paralela a la autopista, todos los camiones y coches que pasaban nos pitaban. Fue una cosa muy bonita”, explicaron.
Al llegar a Abegondo sintieron “una satisfacción personal” al igual que si hubieran realizado el Camino de Santiago. La “fe en el Dépor”, indicaron. Al término del entrenamiento los jugadores escucharon su historia, y como muestra de agradecimiento les firmaron una de las banderas que ondearon durante todo el camino. Más allá del mérito que tienen todos y cada uno de los ocho que realizaron la peregrinación, al no hacer un ejercicio físico diario, merece la pena destacar el caso de Carmen, quien a sus 60 años y con problemas en la rodilla realizó el camino como una más, sin protestar en ningún momento. Cuestionados por si tienen pensada alguna iniciativa más, explicaron que “alguna otra caerá, pero no se sabe porque hay que depender de todo el mundo”. Por el momento tienen pensado acudir mañana viernes a las 11:00 al entrenamiento a puerta abierta en Riazor, además de querer repetir esta experiencia en un futuro próximo.