Íñigo López hizo su puesta de largo como nuevo jugador del Deportivo dejando las cosas claras desde el principio. A pesar de su edad, considera que esta no es su última parada: «No vengo al Deportivo a retirarme. Vengo con una ilusión tremenda, es una puerta que tengo que agradecerle a Carmelo y al club por haber confiado en mí y espero que esta me abra otras. Tengo claro que vengo a sumar para que el Dépor ascienda».
El central reconoce que no tuvo nada que pensar cuando recibió la llamada: «Pocas vueltas hay que darle. Se plantea la operación, llega a buen puerto… todos sabemos el papel en el que vengo. Carmelo me dice lo que necesita de mí y llevo mucho tiempo en esto, no hace falta decir lo que puedo aportar. Estoy encantado y más en mi situación, que vengo de pelear por salvar la categoría y ahora voy a luchar por ascender. Es algo en lo que ya tengo experiencia y ya el año pasado lo conseguí con el Huesca».
Es consciente de lo que se le va a pedir en A Coruña: «Mi rol es aportar experiencia, sumar, apretar para que mis compañeros aprieten y al Dépor le vaya mejor. Quien me conoce sabe que tanto jugando partidos, como estando fuera o en el banquillo, he apoyado y ayudado. A cualquiera que le preguntes sabe que para mí lo importante es sumar. Siempre teniendo presente que estoy en condiciones y si se tiene que echar mano de mí, tengo experiencia y tablas para rendir en partidos de estas características».
Para terminar, Íñigo agradeció el recibimiento y el trato de la entidad en los primeros días: «La gente me ha acogido bien, estoy a gusto. El club se ha puesto a disposición para facilitarme la vida y que sólo me centre en entrenar y estar listo para el domingo. Había coincidido ya con varios compañeros, por lo que la aclimatación está siendo fácil y muy tranquila».