Desde que se instauró el sistema que otorga tres puntos por victoria todos los equipos que arrancan la temporada con el objetivo de mantener la categoría ligan su permanencia al hecho de alcanzar los 42 puntos, una cifra que resultó insuficiente para el propio Deportivo en la temporada 2010-2011, cuando acabó protagonizando el descenso más caro de la historia. Seis años después los herculinos podrían vivir el caso opuesto y acabar firmando la salvación más barata. Y hasta puede que sin agobios de última hora.
Actualmente el Deportivo ocupa el 16º puesto en la clasificación con 32 puntos, dos más que el Leganés y ocho más que el Sporting de Gijón. Con Osasuna y Granada ya descendidos, los asturianos son el equipo que cuenta con más posibilidades de completar el trío de conjuntos que caigan a la Segunda División, un riesgo que aún pesa sobre los blanquiazules pero al que podrían poner remedio el próximo fin de semana.
Tras el empate y la pobre imagen ofrecida ante Osasuna tanto Pepe Mel como los jugadores optaron por el optimismo e hicieron llegar el mensaje de que tan solo resta un punto para la salvación matemática del equipo. Sin embargo, los números se encargan de contradecir esa afirmación, ya que existe la posibilidad de un triple empate a 33 puntos entre Deportivo, Leganés y Sporting. De darse esa circunstancia los herculinos, penalizados por la goleada encajada en Butarque la cual desembocó en la destitución de Gaizka Garitano como técnico blanquiazul, serían los grandes damnificados y el equipo que acabaría perdiendo la categoría.
Para evitar tan terrible desenlace para la entidad herculina, los de Pepe Mel disponen de tres encuentros para certificar matemáticamente la permanencia, tres auténticas bolas de partido con las que finiquitar el objetivo planteado al inicio de curso e incluso maquillar una temporada para el olvido. Espanyol y Las Palmas en Riazor y entre medias el Villarreal a domicilio serán, por este orden, los rivales del Deportivo en esta recta final de campeonato, por lo que todos los esfuerzos están puestos en lograr la victoria en el primero de ellos, este domingo ante los periquitos, tres puntos que sellarían la continuidad en la Liga Santander y que por fin permitirían respirar tranquila a una afición cuya paciencia y comprensión parece estar cerca de agotarse.
Todas estas cábalas podrían quedar en nada, y lo que a priori son tres partidos trascendentales convertirse en meros trámites para los blanquiazules, en función de lo que ocurra esta misma jornada en El Molinón. El Sporting de Gijón recibe a Las Palmas y LaLiga ha dispuesto que ambos disputen su encuentro el sábado a las 13 horas. Con ocho puntos menos que los herculinos, los asturianos están al borde del precipicio por lo que un tropiezo ante el conjunto canario automáticamente garantizaría la continuidad del Deportivo en Primera un año más, algo que los de Pepe Mel habrían conseguido sin tan siquiera saltar al terreno de juego y que sería el fiel reflejo de una temporada en la que la salvación llegaría como consecuencia del paupérrimo nivel competitivo ofrecido por otros equipos y no por méritos propios.