No es el que mejor ataca ni el que mejor defiende. Pero es un equipo que está sabiendo maximizar sus virtudes y aprovechar sus momentos. Así se explica que un Rayo Majadahonda en declive a domicilio llegue a Riazor cuarto, a tan solo cuatro puntos del Deportivo. Y es que todo lo que está perdiendo fuera lo está ganando en casa el equipo de Abel Gómez, al que el cuadro herculino ya logró derrotar un Cerro del Espino que desde entonces es inexpugnable.
Tendiente a ser vertical y sin la necesidad de producir demasiado para marcar. El Rayo Majadahonda amenaza el estatus del Dépor desde su pegada. Y es que el cuadro majariego es uno de los equipos que menos ocasiones claras genera, con tan solo 1,05 goles esperados (xG) por encuentro. Sin embargo, se sitúa en la mitad alta de los goleadores. 36 dianas en 28 encuentros ha cosechado la escuadra rayista -sin contar el triunfo contra el Extremadura de esta segunda vuelta-. Solo el Racing de Santander, el Celta B, la Cultu, Unionistas y el Calahorra mejoran su bagaje.
Basa el equipo entrenado por Abel Gómez su fortaleza ofensiva en la capacidad para hacer daño al espacio. Y es que el Rayo prefiere correr antes que pausar. Y para ello, no tiene problema en jugar directo. De hecho, 1 de cada 7 pases que da son largos: de los 357,8 totales de media, 51,04 recorren una distancia de entre 10 y 30 metros -en función de la zona del campo-.
No necesita buscar el centro lateral (14,66 por partido, en la zona media de la tabla) ni tampoco pisar mucho el área (12,55 toques dentro de la zona, de los que menos). Pero logra encontrar la profundidad a través de su idea, ya que es uno de los equipos que más balones manda al radio de los últimos 20 metros con respecto a la portería rival (5,89 pases profundos).
Sin balón, el Rayo Madahonda concede. Y sus rivales le penalizan relativamente. No destaca en ningún apartado defensivo el equipo madrileño, que encaja más de un tanto por partido (32 en 28). No brilla en los duelos sin balón tampoco la escuadra majariega. El Rayo tiende a temporizar más que a ser agresivo una vez el rival se instala en su campo: permite al contrario 10,76 pases por acción defensiva propia (solo el Racing de Santander y el Dépor tienen un PPDA más alto).
Un ‘Pichichi’… ¿suplente?
Uno de los grandes nombres de la plantilla del Rayo es Héctor Hernández. El delantero, tocayo del lateral del Dépor, es un futbolista consolidado en la tercera categoría del balompié nacional. Esta campaña acumula 9 goles, aunque a raíz de la dolorosa derrota en la última salida (en Tudela), perdió el puesto. Abel Gómez suele apostar por un 4-2-3-1 en el que únicamente hay sitio para un delantero centro nato. Ese suele ser el ex del Albacete, autor de 9 dianas. Pero en el último encuentro ante Unionistas, que acabó con victoria 4-3, el titular fue Rubén Sánchez. El toledano, que llegó a debutar en Primera con el Sporting, ha encadenado titularidades y suplencias. Y cuando ha sido parte del once, ha solido desplazar a Hernández al sector izquierdo. Surge ahora la duda de si el técnico rayista repetirá y volverá a mandar a su máximo goleador al banco.
El otro futbolista diferencial del Rayo era Raúl Sánchez. Pero el extremo ‘voló’ en el mercado invernal dirección Ibiza. Como sustituto llegó Clau Mendes desde Las Palmas. El atacante no ha logrado hacerse con un puesto en el once, aunque cuenta con minutos en todos los encuentros y puede ser un recambio peligroso de cara a la segunda mitad.
Más allá del ataque, el mediocentro Mario García está siendo uno de los futbolistas más destacados. Aunque su líder es Jesús Bernal, acompañante de Mario en el doble pivote. El zaragozano es el capitán general de un bloque con dos buenos laterales derechos como Borja González y el gallego Ángel Bastos, que se rotan en el puesto o incluso conviven ocupando cada uno un carril.
Con estos argumentos individuales, el Majadahonda buscará darle una vuelta de tuerca a su dinámica a domicilio, pues ha cosechado tan solo tres puntos de los últimos 18 en juego. Sus dos últimas salidas acabaron en derrota, pero a finales de febrero fue capaz de clavar una pica (0-1) en Las Gaunas ante un rival directo como la UD Logroñés. Algo de lo que no todos son capaces.