«Este inicio lo habríamos firmado todos. Sin embargo, es anecdótico, todavía no hemos hecho nada». De esta forma definía hace unas semanas Dani Vidal, entrenador del Nàstic de Tarragona, la condición de líder su equipo. El conjunto tarraconense es el mejor hasta el momento del Grupo 1 de Primera Federación. No obstante, los últimos resultados muestran un ligero bajón de rendimiento que tratará de aprovechar el Deportivo esta jornada.
Tras enlazar seis encuentros sin conocer la derrota, los catalanes han visto cómo solo han sido capaces de sumar dos puntos de los últimos nueve posibles. Ante la Ponferradina empataron a cero, pero el aviso serio llegaría en Fuenlabrada, donde los ‘kirikos’ emularon su actuación ante el Dépor y le dieron la vuelta a un resultado adverso para llevarse los tres puntos. Ya el pasado fin de semana sería la Real Sociedad B quien rascase un punto en el Nou Estadi.
Buena parte de esta dinámica se explica a través del rendimiento defensivo más reciente del equipo. Y es que de los cinco goles que han encajado hasta el momento, cuatro los recibieron en los dos últimos partidos. Las porterías a cero, seña de identidad del Nàstic en el arranque liguero, no se han mantenido en las dos semanas previas a su visita al estadio de Riazor. Una circunstancia que a buen seguro buscarán capitalizar los hombres de Imanol Idiakez.
La vuelta a Riazor de dos viejos conocidos
El partido de este domingo supondrá la vuelta al estadio coruñés de dos futbolistas con pasado reciente como blanquiazules: Pablo Trigueros y Gorka Santamaría. El central recaló este curso en el club de la Costa Dorada procedente de la Cultural Leonesa, mientras el delantero vasco lo hizo tras jugar la segunda mitad de la pasada campaña en el Badajoz, con el que descendió a Segunda Federación.