En la tarde del lunes, el juez del concurso en el que está inmerso el club herculino ha emitido un auto en el que resuelve una demanda interpuesta por el propio club.
El juez del concurso en el que está inmerso el Real Club Deportivo de La Coruña, Don Rafael García Pérez, ha emitido esta tarde un auto en el que resuelve una demanda interpuesta por la propia concursada (Deportivo) en la que reclamaba la minorización de la deuda que mantiene con la Agencia Tributaria y el cambio de calificación de diferentes créditos considerados como con privilegio especial. Así, procedemos a desgranar, en la medida de lo posible, un auto posiblemente confuso de un proceso ya de por sí complicado.
En primer lugar, reclama el Deportivo que alrededor de 20 millones de euros se descuenten de la deuda total con la AEAT en base a “sentencias ganadas a ésta”, además de “recalcular los intereses de demora y sanciones”. Sin embargo, como explica la Administración Concursal o el propio juez encargado del concurso, no corresponde a los administradores ni al Tribunal decidir sobre esa reclamación, pues la cantidad viene determinada por una certificación administrativa emitida por la delegación gallega de la Agencia Tributaria en Enero de 2013 y dichas certificaciones gozan de presunción de legalidad y deben ser añadidas al pasivo sin que la administración concursal o el juez puedan hacer nada más que reconocerlas como ciertas e inscribirlas. Añade el juez que para la impugnación de estas certificaciones debe seguirse otro cauce diferente al del mercantil, diferente al proceso concursal en todo caso. Dicho cauce sería la via contenciooso-administrativa. Por tanto, no es un terreno en el que el juez deba extenderse. Pese a todo, también aclara que las sentencias aportadas por la concursada (Deportivo) para esa disminución de la deuda con la AEAT no se corresponden con lo que ésta reconoce como créditos. De todo esto, entonces, se deduce que tiene que ser el propio Deportivo quien comience un diferente proceso para que esas cantidades que reclama como ya satisfechas pasen a serlo efectivamente a ojos de la Agencia Tributaria. Puede extraerse que no niegan ni tampoco clarifican desde el juzgado de lo mercantil la existencia o no de dicho montante como cubierto, aunque sí siembran la duda sobre su veracidad en base a la información aportada por el club en esta demanda concreta.
Por otra parte, reclama también el Deportivo 14 millones de euros correspondientes a los derechos televisivos de Julio de 2012, pero esta cantidad, como explica el juez, se encuentra todavía consignada y sin ejecutar, sometida además a disputa, por así decirlo, entre la Agencia Tributaria y dos entidades financieras. Por lo tanto, puede afirmarse que esos 14 millones existen y se descontarán de la deuda toda vez que sea resuelto a quién preferentemente pertenecen.
Es en la clasificación de los créditos donde el juez estima parcialmente la demanda del Deportivo y no deja lugar a dudas. Son 38 millones y medio de euros de los 67 millones que cuentan con privilegio especial los que el juez considera que deben dejar de tener esa clasificación e insta a la Administración Concursal a que subsane ese defecto en su informe definitivo. Y lo expone en base a que, en una parte de ellos, la Administración Concursal equiparó la cesión de créditos en garantía con la constitución de prenda, calificando así el crédito con la AEAT como de privilegio especial –esto es, para simplificar, de imposible sometimiento a quita en el futuro convenio-. Sin embargo, Rafael García, anclando jurídicamente su postura, rechaza de pleno esta idea negando la equiparación entre cesión de créditos y derecho de prenda, por lo que esos créditos perderán su condición de privilegiados –que legalmente tendrían de ser derecho de prenda- y pasarán a ser ordinarios –esto es, sí podrán ser sometidos a quita-. Asimismo, en base a los derechos de prenda correspondientes a otras cantidades, estima el juez que son en base a créditos futuros, por lo que también tienen que perder esa condición de crédito con privilegio especial.
Así pues, se trata sin duda de un auto favorable a los intereses del Deportivo en relación a la clasificación de los créditos con Hacienda, pues permitirá que una gran cantidad de deuda contraída con el organismo público pueda ser sometida a quita –y por tanto, reducida- en el futuro convenio. También deja meridianamente claro el escrito la existencia de 14 millones de euros todavía no asignados a ninguno de los acreedores. Por el contrario, lo más negativo a los intereses del Deportivo es la duda que siembran desde el Tribunal sobre los 20 millones de euros que el presidente del Deportivo, Augusto César Lendoiro, dice que hay en algún lugar pero que todavía se encuentran sin asignar a la AEAT. De todas formas, corresponde al Deportivo realizar de nuevo esa petición en una reclamación diferente y fuera de los cauces del concurso, pues no corresponde al juez ni a los administradores investigar sobre la pertinencia o no de las cantidades recogidas en las certificaciones administrativas que la Agencia Tributaria emite.