El mercado de invierno continúa dejando noticias sobre ex futbolistas del Deportivo. Primero fueron Borja Valle, de vuelta en España, y Luis Fernández, que se marcha a Polonia. Después les tocó el turno a Keko, que tratará de vivir el sueño americano en la USL Championship, la segunda categoría estadounidense, y a Albentosa, que pone rumbo al Vejle danés. Ahora es Pablo Marí el que cambia el Arsenal londinense por el Udinese italiano. Lo hace en calidad de cedido hasta el final de la presente temporada y sin opción de compra.
El central valenciano apenas estaba contando para su entrenador, el español Mikel Arteta. Sus números (2 partidos de liga y uno de copa) han provocado que la dirección deportiva gunner haya decidido buscar una salida. En su nuevo equipo, que marcha decimocuarto en la Serie A, el otrora defensor deportivista buscará los minutos que no ha tenido hasta ahora en la capital inglesa. Además, no será el único español de la plantilla. Compartirá vestuario con el delantero catalán y canterano del Barcelona Gerard Deulofeu.
Al mismo tiempo que su nuevo club hacía oficial su fichaje, Marí se mostró ilusionado con su nueva aventura: «¡Feliz y orgulloso! ¡Estoy deseando empezar esta nueva aventura y dar lo mejor de mí por esta camiseta y sus aficionados! Forza Udinese!«.
Felice ed orgoglioso! Non vedo l'ora di iniziare questa nuova avventura e dare tutto me stesso per la maglia bianconera e per i suoi tifosi!
FORZA UDINESE! ⚪⚫💪@Udinese_1896 #ForzaUdinese #AlèUdin #UdineseCalcio pic.twitter.com/pLssAKaoH9
— Pablo Mari Villar (@PabloMV5) January 20, 2022
Udinese, otra aventura para el experto viajero Pablo Marí
No se trata ni mucho menos de la primera experiencia en el extranjero de Pablo Marí. El zaguero, canterano del Mallorca, estrenó su pasaporte fuera de España en el NAC de Breda holandés. Allí coincidió con un viejo conocido de la afición deportivista, el lateral Angeliño; ambos cedidos por el Manchester City. Luego, tras jugar una temporada en A Coruña, decidió saltar el charco y probar suerte en el Flamengo, donde vivió una fructífera etapa que le reportaría un par de títulos, el Brasileirão y la Copa Libertadores. Sus buenas actuaciones le abrieron las puertas del Arsenal londinense, donde había jugado hasta este mes de enero.