Salva Ballesta, actual entrenador del San Fernando, analizó al Deportivo en la previa y el estado en el que llega a su equipo. Su equipo cuenta con un excanterano como es Bicho y también con Luis Ruiz, que no podrá jugar ante el Dépor al ser baja.
Un San Fernando que viene a por la victoria
«Es un partido en el que hay mucha ilusión por parte de todo el mundo. Es un rival y un escenario donde lo que vale es ir con ganas, con esa ilusión que te digo que requiere el enfrentarse a una gran plantilla en un gran estadio y de los que todos los queremos enfrentar tanto como entrenador como futbolista. Hay que disfrutar dentro de los parámetros que requiere competir. El equipo va a ir a por todas, no va a ir de visita».
El plan del San Fernando contra el Deportivo
Nosotros no nos vamos a pegar el palizón de viaje para que no salgamos a por ello. Todo lo contrario. Son partidos en los que hay que hacer las cosas muy bien, minimizar los errores y estar muy pendiente a todo. Es un equipo con mucha calidad individual, que concentra muchos jugadores en ataque, que trabaja con laterales altos. Pero nosotros hemos trabajado también nuestras armas para contrarrestar su potencial y para que salgan bien las cosas que hemos entrenado para hacerles daño».
Su análisis del Dépor
«Tiene jugadores importantísimos. Es un equipo que se expresa mucho en ataque y deja la parte de atrás un poco más desasistida. Está muy compensado, juega rápido, con jugadores inteligentes, mucha movilidad. Un equipo de los que también a los entrenadores les gusta entrenar».
El San Fernando que quiere Salva Ballesta
«Espero que, con respecto al anterior partido, el equipo sea mucho más en todo de lo que quiero. Vamos a tener que pagar un peaje, hemos visto que las intensidades son las mías y las de mi equipo técnico y son muy elevadas. ¿Eso pasa factura? Sí. ¿Cuánto? Dos tres semanas. Hay jugadores que les ha costado, que tienen molestias o microrroturas, pero hay que empezar. No es igual que trabajarlo en agosto que meter nuestras ideas tácticas y físicas en una semana. Sabíamos que íbamos a pagar un precio por ello».
El plan de partido de Salva Ballesta
«Nosotros tenemos nuestra idea de atacar a su faceta defensiva. Está claro que su faceta defensiva no es la última línea, sino desde arriba. Incluso hay situaciones que presionan. No voy a comentar cómo lo vamos a hacer. Cuando se encajan goles parece que los defensas no están a nivel, pero a lo mejor donde habría que empezar a taponar o a dificultar la progresión del rival son 30 metros más adelante».
Jugar con los nervios de Riazor
«Estamos hablando de un rival muy poderoso que tiene la obligación de ganar en todos los partidos y en todos los campos. Un rival que somos conscientes de que si no le empiezan a salir las cosas y el resultado empieza adverso no tengo la menor duda de que va a sentir esa afición que no lo va a entender. Con todo ese tipo de cosas hay que jugar».
La obligación del Deportivo de ganarlo todo
«Es una competición muy dura con rivales todos que te pueden complicar los partidos. Quizá es de los partidos que más o que, a priori, no está llamado a estar arriba. Pero a la hora de competir todos los rivales tienen sus armas, unas veces más acertados y otras menos. Yo creo que la historia del Deportivo digamos que, como tiene ese equipo, ese potencial y sobre todo la historia de la que viene que se ha encajado en Primera RFEF y que el año pasado no ascendió, ya cualquier traspié se magnifica. No va a ser el primero ni el último partido que no le salgan las cosas o que no estén muy acertados y perderán y ganaran. Así es el fútbol. El Dépor tiene que navegar por esa espada de Damocles de que tiene que ganar prácticamente todo y dar esa imagen con una exigencia brutal porque por club, por ciudad, por estadio y por afición no solo debería estar en Primera División, sino que debería estar entre los 5 o 6 de Primera. Pero el fútbol no engaña. Cuando se hacen determinadas cosas mal al final te vas metiendo en el hoyo y te encuentras donde te encuentras».