Casi seis meses después de su cese en el Deportivo, Richard Barral compareció para responder a lo que él considera innecesarios ataques de Tino Fernández: «Creía que dejaba un amigo cuando me fui del Dépor, me siento decepcionado. Asumí todas las responsabilidades. Cuál es mi sorpresa que en la primera aparición pública del presidente al acabar la temporada, escucho esos ataques frontales hacia mi persona. No lo entiendo porque no hacía falta, ya había asumido todas las críticas». Así de decepcionado se mostró Barral en los micrófonos de Radio Marca Coruña.
Barral insistió en que su salida había sido en buenos términos: «No sé por qué ha dicho esto, teníamos una buena relación. Las palabras del último día fueron de cariño. Nos dimos un abrazo y le dije que no se preocupara, que era normal separar nuestros caminos. Tenía la confianza del Consejo. Se me renueva, aumenta el salario, y si después llega un momento en el que no lo hay… el presidente y el entrenador iban por otro camino y es lógico que no siga«.
Sin entrar en detalle de las diferencias que terminaron con su salida del club en el mercado de invierno, para el ex director deportivo, tanto esas declaraciones como las que el propio Tino hizo en una entrevista a La Voz de Galicia, fueron una forma de desviar responsabilidades: «Tuve que leerla cinco o seis veces, porque no daba crédito. Más allá de que algunas fueran mentira. Desde el 1 de enero tomó la decisión de no nombrar director deportivo. Si no lo haces tú te conviertes en el director deportivo y las críticas van hacia ti. Si no eres capaz de asumirlas no puedes tener esa función».
También aludió Barral a la insistencia del mandatario a la hora de hablar de renovación en la estructura deportiva, asegurando que si no se organizó antes no fue por su culpa: «Yo he quedado para el último, que se me utilice ahora como arma arrojadiza… Fernando Vidal lo sabe muy bien. Primero se han reforzado otras parcelas, porque había mucho que hacer y había prioridades. Se reforzó mucho el tema de la captación del fútbol base. Se necesitaba más gente ya sólo por un tema físico. Trabajaba 10 horas todos los días de la semana. Pero la situación era la que era y había que remar. Se iban a incorporar tres personas y el presidente me lo aceptó, me dijo que preparara un presupuesto».
La gran diferencia entre Lendoiro y Tino Fernández para Barral
Además de por las formas, Richard Barral también le critica a Tino Fernández que no haya sabido asumir errores como, en su opinión, sí lo hacía Lendoiro: «Alguien que lleva un departamento tiene que asumir las decisiones. Si al final no estás de acuerdo, pues cortas la cabeza. Jamás vi a Lendoiro tirar contra Richard Moar o contra otros. Siempre asumía él las decisiones. Como líder, eso demuestra liderazgo. No puedo echarle la culpa a la gente. Yo siempre le decía a la gente que se mojara, porque el responsable de la plantilla era yo».