Roberto Olabe, centrocampista del Deportivo, fue el protagonista de la entrevista de la semana de RiazorTV. El jugador vasco comentó la actualidad del conjunto blanquiazul en una semana en la que se enfrentarán al Celta B, encuentro que él no podrá disputar al estar sancionado.
La opinión de Olabe sobre el partido de León
«Creo que el equipo es muy maduro. Hay gente con mucha experiencia en el vestuario en quienes nos apoyamos. Eso es un valor extra. No son semanas fáciles porque no conseguimos la victoria, pero conseguimos en cierto modo de puertas para adentro tener un día a día muy bueno. Intentamos no pensar cosas que no nos vayan a aportar. El equipo además tiene la suerte de contar con piezas muy estimulantes para los jóvenes, para que no se paren. Estas cosas van a hacer que lleguemos a este tramo de la temporada firmes».
«El balance fuera de casa es muy malo. Nosotros nos preparamos para ganar el máximo número de partidos posible pero la competición es así. Juegas en casa y también fuera de casa, te tienes que preparar para ello. Cuando juegas fuera te encuentras con situaciones, situaciones, equipos… que son difíciles de superar, pero hay que solventarlos y sacarlos adelante. En concreto, el otro día ellos tenían las cosas muy claras, veían en una mala dinámica y estaban en casa. El inicio de los locales es mucho más enérgico. Creo que era una sensación mala nuestra pero no que el equipo estuviese mal«.
La forma de jugar de Roberto Olabe y las amarillas
«Es verdad que en la posición en la que juego se está expuesto a acciones ‘extremas’, un poco al límite. Tengo que hacer un ejercicio y seguir mejorando mucho, sobre todo con los vídeos. Quizás a nivel táctico y de colocación pueda mejorar algo más y no llegar a esas situaciones no tan al límite. Luego entiendo que también es mi manera de vivir el duelo. Quizás sea un poco bruto, pero no es algo malo si soy consciente de que tengo que mejorarlo. No creo que los árbitros me estén amonestando de más».
Los gritos contra Cano de la afición
«Tenemos que saber donde estamos. Es un lugar muy especial, con mucha masa social. Estamos expuestos constantemente a la opinión de mucha gente y hay que respetarlo. A nivel personal te jode porque en el mundo del fútbol es el entrenador siempre. Cuando las cosas van mal al que tiran es al míster, no hay otra. Pero al final los jugadores también nos sentimos mal porque si escuchamos lo que escuchamos el otro día es porque no les está gustando lo que están viendo. No nos gustan y pienso que los que ganan, empatan y pierden partidos son los futbolistas«.
Una clasificación apretada hasta el final
«Está picante. A nosotros nos gusta que esté así. Estamos muy motivados, tenemos muchas ganas. Sabemos los partidos que nos quedan. Después de analizar todo lo que nos viene pasando a lo largo de la temporada son altibajos dentro de una estabilidad más o menos equilibrada. Tenemos que seguir haciendo las cosas como hasta ahora y prepararnos para ganar. El equipo está dando pasos hacia adelante y creo que lo ha demostrado a lo largo de la temporada«.
La ansiedad por conseguir el ascenso
«Yo estoy muy contento aquí, no me gusta lo fácil ni mucho menos. Tenemos un objetivo claro y muy grande, pero al final tienes que hacer muchas cosas, no solo ganar. También tienes que levantarte después de perder y tienes que generar lo que se está generando en el equipo. Sabía a donde venía. Hay muchas ganas de que el Deportivo vuelva a categorías superiores, pero también esto forma parte del reto de venir aquí y jugar para 27.000 personas o 3.000 fuera de casa. Hay muchas más cosas positivas que negativas«.