Rubén de la Barrera ha dado con la tecla en el Deportivo y eso significa una apuesta clara por los jugadores que han logrado disipar los fantasmas del doble descenso y hacer soñar con el ascenso. En ese grupo hay jugadores que ya formaban parte del once en las malas y han conseguido asentarse también en las buenas, pero ha habido otros que han tenido que sacrificar su puesto como titulares. Uno de ellos es Salva Ruiz, que ante el Zamora tendrá su segunda oportunidad para convencer al técnico coruñés.
Salva Ruiz había sido un fijo para Fernando Vázquez en la primera vuelta (sólo se perdió dos partidos por lesión) y también empezó jugando con De la Barrera, en parte por los problemas físicos de Héctor Hernández. Pero una vez el vallisoletano estuvo a tope, Salva desapareció del equipo.
Desde el pasado 7 de febrero, donde fue uno de los cambios en el intermedio tras el descalabro ante el Coruxo, Salva Ruiz ha jugado únicamente 12 minutos. Los que le tocó disputar en Barreiro contra el Celta B por la lesión de Héctor Hernández. Un total de cuatro partidos de ostracismo en los que ha estado en alguna ocasión cerca de quedarse fuera de la convocatoria.
Salva Ruiz y una posible redención ante el Zamora
Precisamente esa lesión de Héctor es la que le va a proporcionar la posibilidad de redimirse ante el Zamora. Salva Ruiz entrará ahora en un equipo con un mejor funcionamiento colectivo y en el que, con el nuevo esquema, permite una mayor libertad a los laterales. De la actuación del valenciano dependerá que Rubén de la Barrera confía en él para este partido en solitario o que se produzca competencia entre ambos carrileros para los seis encuentros que quedarán después en la segunda fase de la competición.