Se ha hecho esperar, pero finalmente, Samuele Longo ya es nuevo jugador del Deportivo. En lo que ha sido la operación más larga del verano blanquiazul, el club herculino y el Inter de Milán han cerrado el acuerdo para que el delantero italiano llegue a Riazor cedido por esta temporada, con una opción de compra obligatoria en caso de ascenso.
Longo es uno de los jugadores a los que Carmelo del Pozo siempre ha seguido de cerca. Lo intentó el pasado verano, pero él prefirió jugar en Primera con el Huesca. El director deportivo volvió a llamar a la puerta del Inter nada más abrirse este mercado y esta vez sí se encontró con una respuesta positiva. La operación se dejó muy avanzada incluso antes de que el conjunto neroazzurro viajase a la gira por Asia, pero la falta de atacantes a las órdenes de Conte es lo que ha retrasado todo. De hecho, ha tenido una presencia importante en la pretemporada, participando prácticamente en todos los partidos.
La semana pasada el club italiano conseguía el fichaje de Lukaku, despejando el camino de un Longo que este año militará en su sexto equipo del fútbol español. A sus 27 años, el punta ha jugado ya para Espanyol, Rayo Vallecano, Girona, Tenerife y Huesca. Sus mejores temporadas fueron en Montilivi y el Heliodoro, donde marcó 14 y 12 goles, respectivamente, logrando un ascenso a Primera.
En busca de otra pareja productiva
Longo completa la renovada delantera blanquiazul formando pareja con Koné. Carmelo espera que estos dos nuevos refuerzos rindan a un nivel similar al lo que lo hicieron otros dos recién llegados en la 2018-19: Quique González y Carlos Fernández. Ambos llegaron sin hacer mucho ruido y acabaron convirtiéndose en dos de los mejores arietes de la categoría.