En apenas un par de semanas, Saúl García ha pasado de ser uno de los futbolistas peor parados de la plantilla del Deportivo a tener un puesto en el once. Parecía difícil pensar que en algún momento de la temporada se pudiesen lesionar dos de los laterales izquierdos de la plantilla blanquiazul, pero ese momento no solo llegó, sino que además lo hizo en los primeros compases del curso.
La situación del defensor cántabro en las primeras jornadas era, cuanto menos, llamativa. Su notable desempeño en el Numancia durante la segunda vuelta de la temporada pasada sirvió para otorgarle, al fin, un puesto en la primer plantilla del Dépor. En principio, él y Dubarbier competirían por la titularidad, y sus respectivos rendimientos en pretemporada hacían pensar que Natxo González se decantaría por Saúl. En ese momento tuvo lugar la fulgurante irrupción de Caballo, que envió al argentino al banquillo y dejó al ex del Racing fuera de las convocatorias.
Del mismo modo que Saúl pasó, en un breve intervalo temporal, de rozar la titularidad a ser la tercera opción para el flanco izquierdo, ahora ha recorrido el trayecto inverso. La lesión de Dubarbier en el partido de Copa del Rey ante el Zaragoza propició que el cántabro viajase con el equipo para el encuentro ante el Alcorcón, aunque luego se quedó fuera de la convocatoria definitiva. Precisamente en la visita a Santo Domingo cayó Diego Caballo, con una lesión de grado 2 en el aductor medio del muslo derecho.
Y así, Saúl, que parecía destinado a pasar una temporada prácticamente en blanco, se vio ante su oportunidad de reivindicarse. Llegó al partido ante el Granada sin disputar ningún minuto oficial desde junio, pero no se notó en absoluto: el cántabro cuajó un partido completo, se mostró sobrio en tareas defensivas e incisivo en ataque, e incluso estuvo a punto de dar una asistencia de gol en una jugada desbaratada por Rui Silva, portero de los nazaríes.
Con Diego Caballo todavía ausente, Saúl volverá a ser titular en Tarragona. Cuando el salmantino se recupere completamente de su lesión —ya está trabajando con el readaptador, por lo que podría estar disponible para el próximo fin de semana—, Natxo tendrá que elegir de nuevo. Caballo ha sido uno de los jugadores más destacados del Dépor en este inicio de la temporada, pero si Saúl da continuidad a su buen rendimiento y sigue progresando, podría poner en un aprieto al técnico vitoriano.