Adri Castro ha sido el protagonista de nuestras entrevistas de RiazorTV esta semana. El delantero del Deportivo explicó cómo han sido recibidos los canteranos en el vestuario, la piña que forman los más jóvenes y cómo le ha sorprendido para bien la buena sintonía que se ha encontrado en una plantilla profesional: «Yo voy a Abegondo con una sonrisa y me río con la gente. Del primero al último. La sintonía es perfecta. No es fácil porque Miku, por ejemplo, podría no estar contento por los minutos que está teniendo. Pero tú lo ves antes del partido hablando con Claudio y dándole consejos. A mí me parecen todos unos profesionales, de la cabeza a los pies. Me sorprendió mucho porque es la primera vez que estoy en un vestuario profesional. Pensé, por lo que se habla y se ve en las redes sociales, que podría haber mal rollo por alguien que no juega tanto como se merece. Aquí nada. Me sorprendió muy gratamente, del primero al último. Como personas, todos un diez».
Pone como ejemplo la celebración del gol ante el Salamanca: «La imagen perfecta es ese tanto en el 90′ en la primera jornada. Keko estaba en el banquillo, miré a los lados y ya estaba en el medio del campo. En eso se ve. En el banquillo nos volvimos locos. Parecía que acabábamos de ganar la Champions. Fue una locura«.
Adri Castro y los vaciles entre fabrilistas
Apunta que los vaciles entre el grupo de exfabrilistas son constantes: «Esto todo supersano, estamos de coña siempre. En el vestuario solemos estar los más jovencitos. Me junto mucho con Galán, Gandoy y Mujaid, que ya los conocía de antes… Gandoy hay veces que no nos habla en todo el entrenamiento, nos evita y nos dice que no quiere saber nada de nosotros, que lo dejemos en paz. Pero recibimos todos. Un día él, otro día Valín, otro yo… eso va por días«.
Los consejos de los veteranos
Adri Castro está aprovechando al máximo la oportunidad y, aunque no ha tenido minutos, trata de empaparse de todos los consejos que pueda recibir de los más veteranos: «A mí con Eneko me gusta hablar de fútbol. Hablo muchísimo con él. Con Borja Granero hablo muchísimo también. Y otro que me está ayudando mucho es Miku, habla mucho conmigo. Son gente de fútbol. Con Eneko puedo estar perfectamente media hora hablando. Después del partido de Unionistas, lo primero que hice fue hablar con él, que cómo nos había visto, qué había que mejorar…».
Por eso, en parte, se muestra tranquilo mientras espera su oportunidad: «Hay que tener calma, paciencia y aprovechar la oportunidad. En el momento en el que se me dé esa oportunidad, aprovecharla de la manera que sea. Cuajando buenos minutos, metiendo un gol o dando una asistencia. Sin ninguna presión. Miku me dice, ‘la oportunidad estoy seguro de que la vas a tener, pero tienes que estar preparado, sean un minuto, dos o cinco’. Es en lo que me centro cada día, en estar preparado para esos minutos. Y si no, si el míster decide no convocarme, pues estar preparado también para ese cambio de chip con el Fabril».