Cuando todo parecía perdido, el Deportivo ha sacado las uñas para agarrarse con fuerza a la Primera División. Y esa reacción ha tenido nombre y apellidos: Adrián López. El asturiano se ha reencontrado con el gol en el momento justo y ha sido decisivo para que el conjunto blanquiazul encadenara dos triunfos consecutivos que lo permiten mantenerse con vida en la lucha por la permanencia. Dos dobletes en una semana, cuatro goles en dos jornadas, algo que ningún jugador deportivista conseguía en Primera desde Xisco en 2008.
La época del año era similar y la situación del Dépor, aunque ligeramente más esperanzadora, también preocupaba. El entonces conjunto dirigido por Lotina acabó la jornada 29 a dos puntos de la zona de descenso, pero gracias al balear dio un golpe sobre la mesa en los dos siguientes partidos disparándose hacia la salvación. Hat-trick en el 3-1 al Murcia y 1-3 en la visita al Racing de Santander con otros dos goles para un total de cinco dianas, una racha que le sirvió para atraer de forma definitiva las miradas del Newcastle.
Los de Seedorf también han marcado seis tantos en estos dos encuentros que, si bien siguen dejando la zona de permanencia a una distancia considerable, al menos sirve para mantener viva la ilusión. Y para ello ha sido necesario todo el acierto del asturiano, que ahora mismo es el máximo goleador del equipo con nueve tantos en lo que va de Liga, marca que ya es su mejor registro en una temporada contando sólo el campeonato doméstico.
Después de un regreso que no gustó a todos, Adrián se ha convertido en uno de los jugadores más regulares en esta complicada temporada del Dépor. La llegada de Seedorf le concedió todavía más peso al convertirse en el portador del brazalete, pero su 2018 no estaba siendo bueno en cuanto a números. Sus últimos dos goles habían sido los del triunfo ante el Leganés en diciembre y la derrota del Bernabéu en enero.
El asturiano suma nueve tantos, su mejor registro en una Liga, y es el máximo goleador del equipo
Su insistencia le ha permitido recuperar el olfato y le sitúa como uno los delanteros más en forma de Primera, convirtiendo en gol casi todo lo que toca y manejando además diferentes suertes. De estos últimos cuatro tantos, dos han sido con la derecha, los dos ante el Málaga, uno con la izquierda y otro de cabeza. Hace diez años Xisco marcó en esa racha sus últimos tantos de la temporada, algo que no podrá permitirse el asturiano si quiere que el Deportivo siga aspirando a lograr el milagro de continuar en Primera.